Boca 2 - Aldosivi 1 - Torneo de Verano 2019

CON EL TRIUNFO POR 2-1 ANTE ALDOSIVI BORRÓ EN PARTE LA MALA IMAGEN QUE HABÍA DEJADO ANTE UNIÓN

Boca pareció por momentos un equipo de Alfaro y al fin tuvo una sonrisa de verano

Los goles los marcaron Wanchope Ábila, de penal, y Zárate, tras una linda jugada colectiva. Descontó Chávez. Debutaron Marcone, Campuzano y Marcos Díaz.

Ni el típico aroma a puerto que suele invadir las noches ventosas marplatenses pudo ser más fuerte que el perfume que sobrevoló un estadio José María Minella que al fin tuvo un verdadero clima cálido con sus populares colmadas. Hubo fragancia a equipo de Gustavo Alfaro. Es ese que invita a ver un equipo confiable, apoyado en el clásico 4-4-2, con un doble cinco firme, volantes externos rápidos y una dupla de delanteros filosos. Boca fue esta vez el Boca de Alfaro. En su segunda y última presentación de verano, cambió la imagen y se quedó con un triunfo ante el local Aldosivi, que intentó pero se vio claramente superado.

Mostró otra cara Boca. Muy distinta a la que se vio el miércoles en el debut de su nuevo entrenador contra Unión. Alfaro modificó nombres y esquema.

Bajo la luna llena que decoraba el cielo limpio de La Feliz, el entrenador se volcó por el dibujo táctico que más seguridad le brinda. Y no le falló el olfato a Lechuga. Pero, más allá del número telefónico, se notó un carácter distinto en Boca. Otra energía. Más vigorosa, claro. Y la causa es muy posible que se encuentre en los nombres.

Muchos de los que jugaron anoche tienen en claro que deben ganarse un lugar entre los titulares. Con Carlos Tévez, Darío Benedetto, Cristian Pavón, Sebastián Villa y Wilmar Barrios mirando desde el banco, Ramón Ábila, Mauro Zárate, Emanuel Reynoso, Iván Marcone y Jorman Campuzano intentaron aprovechar al máximo la chance de mostrarse que les dio el DT.

Bebelo fue de los más desequilibrantes. Recostado sobre la banda izquierda participó en varias situaciones de riesgo que terminaban en Wanchope o en Zárate. El dúo ofensivo tuvo mucha acción. Zárate se perdió un par y Ábila tiró por arriba un cabezazo.

Hasta que el árbitro vio penal de Lucas Villalba sobre Reynoso. El de Aldosivi tocó primero la pelota aunque luego se llevó puesto a su adversario. Wanchope lo canjeó por gol, para meterle presión al Pipa Benedetto en la competencia interna.

Zárate no quiso ser menos y coronó con un golazo una muy buena jugada colectiva que se inició en los pies de Esteban Andrada. ¿Quién dijo que los equipos de Alfaro no podían salir jugando de abajo? Boca lo hizo y la pelota terminó adentro del arco de Luciano Pocrnjic, después de que el arquero se la diera a Junior Alonso (jugó de lateral izquierdo), de que el paraguayo se la pasara a Bebelo, de que Ábila la dejara correr entre sus piernas para que le llegara a Mauro y de que el ex Vélez definiera con calidad.

El Tiburón chapoteó sin morder. Se encontró enjaulado siempre. El único que buscó zafarse de las amarras boquenses fue Cristian Chávez, el ex San Lorenzo, de muy buena Superliga. En la primera parte se topó con Andrada. Pero en el complemento tanto la guapeó que él solito se fabricó el descuento (con colaboración de Julio Buffarini) ya con el arco azul y amarillo ocupado por Marcos Díaz, quien hizo su debut. Díaz tuvo su tapada bautismo al quitarle el empate a Nahuel Yeri.

Otro de los puntos altos en Boca fue Marcone, dominador y distribuidor del balón en el círculo central xeneize. El que cumplió aunque no se destacó en su presentación fue Jorman Campuzano. De todos modos, el visitante se mostró sólido en el mediocampo. Carlitos, Barrios, Pavón sumaron algunos minutos en la última parte, cuando Boca ya había bajado la intensidad.

Ahora el que tendrá que elegir a quién poner el domingo contra Newell's en Rosario en el regreso de la Superliga será Alfaro, quien ya le empezó a impregnar su perfume al equipo.

El esquema táctico que esta vez eligió Alfaro fue un 4-4-2, su dibujo preferido. Y funcionó.

Racing 1 - Rosario Central 0 - Torneo de Verano 2019

VENCIÓ 1-0 A ROSARIO CENTRAL

A Racing le alcanzó con poco para ganar antes del reinicio de la Superliga

En Mar del Plata, se llevó la victoria gracias a un penal de Cristaldo, la figura, y contó con el debut de Cvitanich.

El puntero de la Superliga volvió a aparecer en Mar del Plata con sus titulares, a excepción de Lisandro López (ausente con aviso por precaución), y esta vez sí pudo imponer su juego, más allá de algún sofocón, de la mano de Jonatan Cristaldo y Ricardo Centurión. Así fue como Racing le ganó a un flojo Rosario Central por 1a0 y se repuso de la caída del lunes con Gimnasia justo a tiempo para encarar con el ánimo en alza la última semana de preparación para el torneo local.

Si alguna finalidad tienen estos partidos veraniegos, además de apaciguar un poco el efecto de abstinencia de fútbol en el receso, es la de servir como tubos de ensayo para los entrenadores, que anotan en su cuadernito las conclusiones. Y una que seguramente habrá marcado Eduardo Coudet es que no le será sencillo tocar a Cristaldo del equipo titular. Tendrá que remarla Darío Cvitanich, quien hizo su estreno a los 3 minutos del complemento, para ganarse un lugar al lado de Licha.

El Churry dejó bien en claro con su rendimiento en estos encuentros que tiene todas las intenciones de seguir entre los once. Fue el mejor del conjunto de Avellaneda en la derrota ante Gimnasia por 2 a 1: marcó el descuento y le hicieron un penal no cobrado al final. Y otra vez fue el más destacado contra Central.

Desequilibrante. Rápido. Ágil. Se movió por el área rival como un camarón embrujado en el mar revuelto de la defensa rosarina. Jugó e hizo jugar también cuando retrocedía unos metros. A él lo bajó Claudio Rinaudo, que hizo agua en la marca durante toda la noche, para el penal que esta vez sí sancionó Hernán Mastrángelo, que unos minutos atrás había ignorado uno del arquero Jeremías Ledesma sobre el propio Cristaldo.

Y fue el delantero quien definió para su segundo tanto de 2019. Pero no anduvo surfeando en soledad Cristaldo. Tuvo en Centurión a un compañero de ataque inusual. Ricky, entre firuletes y algún caño, animó a las tribunas a medio poblar (algo que se repitió en los anteriores amistosos en esta ciudad) y tuvo su chance, ahogada por Ledesma.

Los dirigidos por Edgardo Bauza encontraron algo de aire para avanzar por los costados, principalmente con las subidas de Alfonso Parot por la izquierda. Gabriel Arias le sacó un disparo potente y ya en el segundo tiempo metió un centro pasado para Gonzalo Bettini, que no logró conectar. A esa altura, Central había reaccionado. Se adelantó varios metros en el campo y estuvo cerquita del empate. En la misma jugada, Arias le impidió el gol de Diego Becker y al toque Leonardo Sigali se la sacó en la línea a Germán Herrera.

Más allá de ese rato, al Canalla le faltó volumen de juego. El despliegue de Néstor Ortigoza no fue suficiente. Y al no aprovechar su momento en el partido, Racing volvió a dominar la pelota para mantener la calma y el resultado a favor.

Independiente 2 - Gimnasia 0 - Torneo de Verano 2019

EL DELANTERO FUE LA FIGURA DE UN EQUIPO QUE GANÓ PERO MOSTRÓ POCO FÚTBOL

Un inspirado Benítez disimuló las carencias de Independiente

El misionero hizo el primer gol y asistió en el segundo a Cerutti. Gimnasia ofreció una versión muy pobre.

De falso nueve sólo tuvo el falso, Martín Benítez, que se movió en una inusual posición para él como la de centrodelantero ante un traumatismo en un tobillo de Silvio Romero y rompió la monotonía de una noche muy fría y no menos aburrida con un gol bien de nueve para encaminar el triunfo de Independiente ante Gimnasia por 2 a 0. Recogió una pelota que quedó extraviada en el área rival en una segunda jugada después de que Braian Romero la bajara de espalda al arco. De volea, Benítez partió el arco de Alexis Martín Arias y luego del festejo, mientras volvía hacia su campo, el delantero le levantó el pulgar a Holan, tan apuntado por estas horas.

El gesto de Tín, quien con este entrenador logró alcanzar el máximo nivel de su carrera, fue todo un mimo para el Profesor en tiempos compulsivos por los dardos que siguen cayendo sobre su persona desde los futbolistas que debieron hacer las maletas para dejar Avellaneda en este mercado de pases. El último fue Fernando Amorebieta, que se sumó a Emmanuel Gigliotti y Leandro Fernández. La victoria resultó una caricia para el DT.

De todos modos, no fue mucho más que ese grito, Independiente en La Feliz. Fernando Gaibor lejos estuvo de imponer su juego. Esta vez le tocó ejercer la función de doble cinco al lado de Nicolás Domingo (titular por una sobrecarga muscular del chileno Francisco Silva) cuando el ecuatoriano se siente mucho mejor si Holan le otorga mayor libertad como volante tirado a la derecha.

Tampoco Pablo Hernández, ubicado detrás de Benítez, resultó ser la manija del Diablo. Fue el atacante misionero quien se destacó por su entrega ante la falta de fútbol en Independiente. Ya en el comienzo había probado con algún remate sin puntería. En ese arranque pareció que el Rojo iba a ser un claro dominante en el Minella. Pero no fue tan así. Los de Pedro Troglio, a puro pulmón, equilibraron rápidamente la balanza.

Con presión, al igual que en el triunfo del lunes por 2 a 1 contra Racing en este mismo escenario, el Lobo intentó atosigar a su adversario. Y anduvo merodeando el área de Martín Campaña aunque sin provocar peligro real. Una seguidilla de tiros de esquina y no mucho más hizo Gimnasia, que sabe que tendrá un semestre duro en la lucha por la permanencia.

Ese gol de Benítez le llegó al Diablo justo en ese momento en que ya no era superior. Y a partir de ahí la cuestión fue otra. Pudo haber cambiado de nuevo la mano en ese mano a mano inmejorable que Horacio Tijanovich perdió ante la humanidad del bueno de Campaña, que salvó la ropa de su equipo en esa que fue la mejor situación del cuadro platense.

Gimnasia ahí se terminó de desinflar. Y todo se le hizo aún más negro que la noche marplatense cuando de un error en la salida de Kevin Gutiérrez nació el segundo de los de Avellaneda. Otra vez fue clave Benítez. No hizo el gol, pero se lo sirvió a Ezequiel Cerutti, que le sacó jugó a su chance desde el inicio.

Benítez siguió con su repertorio, que incluyó un par de disparos desde afuera. Francisco Pizzini (entró por un apático Gaibor) tuvo las suyas y no supo definir con fineza. El final fue un monólogo todo rojo. Independiente terminó tocando de lado a lado ante un rival entregado. Un buen sabor en la boca le quedó a Holan en el único encuentro de esta pretemporada, a la espera del retorno de la Superliga, el domingo 27 con Talleres.

Boca 0 - Unión 2 - Torneo de Verano 2019

UNIÓN LO VENCIÓ CON CLARIDAD EN MAR DEL PLATA CON UN DOBLETE DE LOTTI

Boca desaprobó en el debut de Alfaro y tiene mucho por mejorar

El equipo lució desorientado, sin poder ofensivo y con una floja resistencia de los defensores centrales.

No será sencillo. El mal de amores no se cura de un día para el otro. Un corazón despedazado por la derrota más dura de la historia sufrida hace apenas 39 días tardará en recomponerse. El duelo continúa. En su primera presentación después de la final de la Libertadores perdida ante River en el Bernabéu, el Boca de Gustavo Alfaro, con una mezcla de titulares y suplentes, dejó expuesto su dolor en Mar del Plata. Unión le ganó bien por 2 a 0 con dos jugadas aéreas y profundizó la crisis post Madrid.

Bajo un cielo negro iluminado por relámpagos, no pudieron ser peores los primeros minutos del ciclo Alfaro en Boca. Todo lo contrario a lo que se vio en cualquier equipo bajo la tutela del entrenador de 56 años. ¿Orden, firmeza defensiva, avance en bloque? Nada de eso. La desorganización reinó en esa primera parte en el José María Minella, donde fue Unión el que apretó el acelerador.

El equipo santafesino demostró mayor ímpetu para el ataque organizado y desdobló el mediocampo azul y amarillo, compuesto por Wilmar Barrios y el debutante Nicolás Cataldo, que no lograba hacer pie y se desvanecía entre imprecisiones. El Boca desorientado de Alfaro, que nada hacía de lo que pretendía el DT, tardó 15 minutos en sufrir la primera llegada y el primer gol en contra.

El desborde y buen centro desde la derecha de Damián Martínez estuvo perfectamente apuntado a la cabeza de Augusto Lotti, quien había ingresado por Braian Álvarez (esguince en el tobillo derecho) tres minutos atrás y clavó el 1 a 0. Floja resistencia de los centrales boquenses, principalmente del refuerzo Junior Alonso. Y hubo complicidad también del arquero Esteban Andrada. Con Marcos Díaz sentado en el banco de suplentes, el arco será todo un tema en Boca. ¿Quién se quedará con el puesto de titular?

La lupa en Carlos Tévez, a quien Alfaro le devolvió la “10”, la cinta de capitán y la titularidad, no descubrió una buena imagen. Carlitos nunca fue manija. No pudo en toda la fresca noche costera ser el dueño del fútbol de Boca y mucho menos del partido. Lo intentó en el segundo tiempo, con un tiro libre en el travesaño sobre el final incluido. El semblante fue otro del equipo de la Ribera. Salió acusando una reacción. Sin embargo, el arco de Nereo Fernández, que en el primer tiempo tapó un remate de Pavón, le seguía quedando lejísimo.

Unión fue más práctico. Diego Zabala hizo lo que quiso por la izquierda y sacó el pase aéreo para Lotti. El pibe que está a préstamo de Racing le ganó de nuevo a Alonso y metió el frentazo para su doblete. Nada más que hacer para Boca, que no había hecho mucho. Tendrá que hacer una tarea fina Alfaro para que su Boca empiece a verse de a poco. Apenas fue el debut, es cierto, tanto como que en la cabeza del plantel todavía no puede salir la pesadilla del Bernabéu. Y para escribir una historia nueva, Boca aún necesita dar vuelta la página.

Nacional (Uruguay) 0 - River 1 - Torneo de Verano 2019

CON MAYORÍA DE TITULARES LE GANÓ 1-0 UN AMISTOSO A NACIONAL

River avisó que está listo para volver a competir por los puntos

Quintero, de penal, anotó el gol del equipo que el sábado, por la Superliga, recibirá a Defensa y Justicia.

Puede quedarse tranquilo Marcelo Gallardo. Porque en su primera y única prueba del año, antes de volver a la acción oficial, su River respondió como si las piernas no pesaran en la parte final de la pretemporada. Fue a Uruguay a jugar con Nacional, en un partido armado con la excusa de homenajear al DT, y en el rato que actuaron los titulares demostró estar sólido y confiado, más allá de algunos ajustes por hacer. Como si la final de la Copa Libertadores hubiese sido hace apenas una semana. Buena muestra antes de afrontar el sábado el primero de los postergados de la Superliga ante Defensa y Justicia.

La mejor de las conclusiones que puede sacar el entrenador es que la versión 2019 de Franco Armani se parece a la más alta de 2018. En el comienzo del partido fue lo mejor del Millonario. Tapó un mano a mano, se lució en el rebote y cuando parecía que se le metía, sacó un manotazo espectacular para evitar que Nacional tomara una rápida ventaja. A partir de él y de sus atajadas, el equipo tomó confianza.

Luego, el fútbol apareció después del sacrificio. River debió trabajar en defensa primero para crecer en ataque. Y fue de menor a mayor.

Con buena presión en la salida, el equipo argentino recuperó una pelota que hasta el cuarto de hora era propiedad del equipo de Eduardo Domínguez, al que se le terminó un llamativo invicto en enfrentamientos con el Muñeco. Cuando esa pelota comenzó a pasar por los pies de Juan Fernando Quintero, todo cambió.

El colombiano se asoció bien con Ignacio Fernández y juntos suplieron bien la ausencia de Gonzalo Martínez. Gallardo tendrá que encontrar en los juegos por los puntos cómo reemplazar el fútbol y los goles de su mejor jugador, hoy en la MLS. Por un rato, en Punta del Este, lo consiguió. De hecho, Quintero mostró que tiene la capacidad para ser el conductor del equipo y con una pincelada generó un penal que él mismo, tras pedirle la pelota a Pratto, cambió por gol.

Nacional se apagó por completo con ese tanto y River no volvió a sufrir mientras sus titulares estuvieron en la cancha. A los once de siempre, sin los que se van (Pity y Maidana, reemplazados por Quintero y Martínez Quarta), sólo les faltó el capitán Ponzio, al que el entrenador le dio descanso. Enzo Pérez ocupó su lugar.

En el segundo tiempo, los cambios (cada equipo podía hacer 10) comenzaron cumplido el primer cuarto de hora y la historia fue otra. Entraron Zuculini, Mayada, Moreira y varios juveniles, los que piden pista para ser parte del campeón de América. A todo esto, Armani siguió, incansable, tapando una contra tras otra.

En definitiva, Gallardo debe volver conforme a Buenos Aires. Tendrá apenas días para afinar la máquina y luego jugará ante el difícil Defensa, el escolta de Racing y un escollo trascendental si quiere pelear por la Superliga. Hoy está a 17 de la Academia, pero tiene cuatro partidos menos y si gana todo podrá acercarse a cinco, sabiendo que todavía tiene que enfrentar al puntero. Difícil. Pero soñar no le cuesta a este dulce River.

Racing 1 - Gimnasia 2 - Torneo de Verano 2019

EL EQUIPO DE COUDET PERDIÓ 2 A 1 EN MAR DEL PLATA EN SU ESTRENO EN 2019

Racing se despertó tarde y se dejó sorprender por Gimnasia

El Lobo se puso 2 a 0 a los 25 minutos y luego se defendió con orden. Mussis, Guanini y Cristaldo, los goles.

Menos mal, para Eduardo Coudet y su Racing, que la de este lunes no fue -todavía- la noche del 26 de enero, que el rival no fue Aldosivi y que no se trató de la reanudación de la Superliga, que lo tiene como único líder y máximo candidato al título. Fue aquí, en Mar del Plata, sí. Pero se trató, para alivio del Chacho, sólo del primer amistoso de la pretemporada en la costa argentina.

Sin Lisandro López y sus habituales titulares, que se quedaron en Buenos Aires afinando la puesta a punto (con Darío Cvitanich incluido), Gimnasia le ganó 2-1 haciendo uso de la pelota quieta. Desde arriba no se ve, cantó La Academia en un José María Minella despoblado (estuvo en un 40 por ciento). Sufrió por la vía aérea este Racing alternativo, que se sacó la modorra sobre el final aunque no le alcanzó para la igualdad.

Noche de pruebas y errores para los de Avellaneda. Y noche de regresos con abrazos y de estrenos auspiciosos para los platenses. Tardó cinco minutos Franco Mussis para sellar su retorno con un gol de su autoría. El volante central que volvió al club que lo vio nacer y por el que tiene un afecto más que especial fue quien recolectó esa pelota que quedó perdida en el área de Javier García y clavó una volea potente para el 1 a 0 tempranero, que tomó a todo Racing por sorpresa.

Esa jugada provino de un tiro libre bien ejecutado por Alexi Gómez, el volante peruano que llegó desde el Minnesota United y se calzó la 10 del Lobo por primera vez en La Feliz. Gimnasia golpeó primero con un arma que sabe utilizar: la pelota quieta. Y exactamente lo mismo hizo 20 minutos más tarde. Esta vez el envío fue de Víctor Hugo Ayala. El ex Lanús le dio rosca a su remate, que fue teledirigido al parietal izquierdo de Manuel Guanini, quien le ganó en el salto a Lucas Orban y a Rodrigo Schlegel.

Le costó reaccionar a Racing. No pudo llegar al arco de Alexis Martín Arias con real peligro durante toda la primera etapa. Y la única jugada triangulada la construyeron entre Augusto Solari, el pibe debutante Alexis Cuello y Neri Cardozo. Esa acción terminó con el desborde de Solari y un centro sin destino feliz. El ex River volvió a ganar por la derecha en la siguiente, aunque tampoco prosperó su envío.

Con un Pol Fernández sin hacerse dominador de la pelota, a La Academia se le hizo complicado encontrar claridad para llegar al arco rival. Un error de Guanini, que le entregó la pelota a Cuello, pudo haber significado el descuento, pero Jonatan Cristaldo tiró su disparo por arriba del travesaño. Para esa altura, Gimnasia ya se había replegado con la ventaja de dos goles a su favor y Racing abusaba de la tenencia sin dañar.

Lo que sí dañaba era el juego brusco que el árbitro Fernando Echenique permitió. Mussis y Santiago Silva debieron ser al menos amonestados por fuertes patadas. Silva, incluso, se cansó de hablar y de provocar a Orban y a Schlegel ante la mirada del juez que estuvo decidido en no sacar tarjetas.

Todos atrás y Silva de 9 fue el segundo tiempo de los dirigidos por Pedro Troglio. La cancha se recortó a los 50 metros del campo platense, con Racing en el mismo ritmo monótono del primer tiempo. El Churry Cristaldo rompió con la modorra de todo Racing marcando el descuento con un grito bien de goleador. Sirvió para ponerle pimienta al final de un partido típico de verano.

Gimnasia tuvo un par de contraataques, con un tiro en el palo de Comba incluido, en los que pudo estirar la ventaja. Y los del Chacho, ya con Ricardo Centurión en cancha fueron a buscar un empate que nunca pudo encontrar. Todo Racing espera que el 26 ante Aldosivi, la historia en este mismo estadio sea bien diferente.

Programación Torneo de Verano 2019

Mirá los árbitros, días, horarios y TV del Torneo de Verano 2019.

Viernes 11 de enero
22:10 | San Martín de Tucumán - Talleres de Córdoba.
Árbitro: Fernando Espinoza. TV: FOX Sports Premium.
Estadio Padre Ernesto Martearena, Salta.


Domingo 13 de enero
22:10 | Rosario Central - Belgrano de Córdoba.
Árbitro: Silvio Trucco. TV: FOX Sports Premium.
Estadio Gigante de Arroyito, Rosario.


Lunes 14 de enero
22:10 | Racing Club - Gimnasia y Esgrima La Plata.
Árbitro: Fernando Echenique. TV: FOX Sports Premium.
Estadio José María Minella, Mar del Plata.


Martes 15 de enero
22:10 | Nacional de Uruguay - River Plate.
Árbitro: Christian Ferreyra. TV: FOX Sports Premium.
Estadio Domingo Burgueño Miguel, Maldonado, Uruguay.


Miércoles 16 de enero
22:10 | Boca Juniors - Unión de Santa Fe.
Árbitro: Mauro Vigliano. TV: FOX Sports Premium.
Estadio José María Minella, Mar del Plata.


Viernes 18 de enero
22:10 | Independiente - Gimnasia y Esgrima La Plata.
Árbitro: Ariel Penel. TV: FOX Sports Premium.
Estadio José María Minella, Mar del Plata.


Sábado 19 de enero
22:10 | Racing Club - Rosario Central.
Árbitro: Hernán Mastrángelo. TV: FOX Sports Premium.
Estadio José María Minella, Mar del Plata.


Domingo 20 de enero
22:10 | Boca Juniors - Aldosivi de Mar del Plata.
Árbitro: Pablo Echavarría. TV: FOX Sports Premium.
Estadio José María Minella, Mar del Plata.


Lunes 21 de enero
21:10 | Belgrano de Córdoba - Talleres de Córdoba.
Árbitro: a designar. TV: FOX Sports Premium.
Estadio Mario Alberto Kempes, Córdoba.

Boca 0 - River 1 - Torneo de Verano 2018

MUCHOS ROCES Y ESCASA CLARIDAD

River se quedó con la primera sonrisa del año en un partido de bajísima calidad

Boca propuso lucha en el medio y así salió el primer tiempo. River sacó ventaja cuando su rival parecía controlarlo. Tévez estuvo lejos del área y Pity Martínez fue el más destacado.

La primera sonrisa de 2018 fue para River y Gallardo en un Superclásico flojo, con demasiados errores y al que apenas el solitario gol de Borré lo salvó de ser la gran decepción del verano. Al cabo, se trató de un clásico que dejó muchas más incógnitas en Guillermo y en Boca de lo que puede tomarse como tranquilidad para los de Núñez, que ganaron porque hicieron un poquito mejor las cosas con la pelota en los pies y aprovecharon la falta de ideas de Tévez y cía. El Mellizo terminó el verano sin triunfos y espera el reinicio de la Superliga aún puntero pero con el ánimo golpeado.

El partido más esperado de enero tuvo un primer tiempo desprolijo y mal jugado. Las imprecisiones reinaron en la salida de Martínez Quarta y cada vez que Boca intentó avanzar más allá del mediocampo. Se notaron miedos y especulaciones. Y un detalle lo ilustró: Peruzzi y Saracchi pasaron al ataque sólo en una ocasión, los otros dos laterales no lo hicieron. En dos equipos que suelen ir para adelante con ambición y desplegar hombres en el campo rival, fue una rareza.

Los primeros diez minutos, esos en los que el conjunto de Gallardo mantuvo la presión bien elevada, fueron un espejismo. Luego Boca lo llevó al partido que planificó: en el primer tiempo en el juego de estrategias, Guillermo se impuso al Muñeco porque River no tenía espacio libre ni ideas para crear con Enzo Pérez o Pity Martínez. Ahí, con Nández y Buffarini, los del Mellizo presionaron bien, asfixiaron mejor pero atacaron mal. Sin Pablo Pérez ni Cardona a disposición, a Boca le costó generar situaciones porque apostó siempre al uno contra uno de Espinoza y Pavón, quienes no tuvieron una buena jornada.

Y en esa trampa cayó Tévez, quien en toda la primera parte se movió lejos del área, cercano al círculo central, dejando al ataque de los de azul y amarillo sin referencia. Al Apache, como en aquella Copa del 2016, se lo notó incómodo jugando entre los centrales y esperando la pelota. Pero la fue a buscar muy atrás para tener contacto. Del otro lado, Scocco dejó ver que no le gusta el roce y que lo evita (esa tarea, al cabo, será para Pratto). A Gallardo se lo observó muy molesto, pero cuando Boca estaba mejor plantado, apareció el gol de Borré (de gran pretemporada) ante errores compartidos entre Goltz y Rossi, quien descuidó el primer palo.

Otro colombiano que generó un dolor de cabeza a Boca en el verano. Es que el gol de Borré pareció lo menor. El gran drama de esta pretemporada es que Guillermo no pudo probar en ninguno de los amistosos su equipo ideal, ese que incluye a Barrios, Fabra y Cardona como titulares.

La segunda etapa fue algo similar, con una marcha menos en la velocidad, pero con River más cómodo a partir de la ventaja y con una mitad de la cancha ideal orquestada por Ponzio y con laderos que modificaron con la salida de Pérez y el ingreso de Ariel Rojas. El escaso fútbol de la noche lo puso la zurda de Pity Martínez, quien gambeteó bastante pero más de una vez lo hizo para proteger la pelota en lugar de lastimar al rival. Con esas pinceladas igual le alcanzó para destacarse ante rivales que lo buscaron siempre a destiempo.

El ingreso de Wanchope Ábila fue casi obvio. Así, Boca mutó de 4-3-3 a 4-2-3-1 con Tévez atrás del ex Huracán. Pero tampoco gravitó el Apache, al que lo consumieron sus ganas de ir a buscar la pelota más cerca de Nández que de sus compañeros de ataque. Tan poco hizo Boca por el gol que Lux ni siquiera tuvo una jugada para mostrar en un resumen de TV. Gallardo fue sacando a los puntas, Guillermo los sumó. Pero la maraña del Superclásico se esfumó entre la roja a Buffarini y el festejo millonario. El amistoso fue de los de Gallardo. El 14 de marzo el clásico vale un titulo.

San Lorenzo 1 (3) - Gimnasia 1 (1) - Torneo de Verano 2018

EL EQUIPO DE BIAGGIO VENCIÓ A GIMNASIA EN SALTA

San Lorenzo mejoró en el juego, pero recién festejó en los penales

Belluschi le daba un triunfo justo. Un error de Torrico lo llevó a penales. Allí, el “1” atajó dos y luego se lesionó.

Héroe de mil batallas, ayer Sebastián Torrico tuvo uno de esos errores impensados para un arquero de su nivel. Y San Lorenzo, que acariciaba el triunfo en los noventa minutos, debió esperar hasta la definición por penales para cantar victoria. Sin embargo, en la lluviosa noche salteña y más allá de la falla del mendocino, los azulgranas mejoraron su nivel del verano, aunque esta vez pagaron caro su falta de efectividad.

Apenas habían pasado 14 segundos de partido que San Lorenzo ya tuvo su primera chance: el despeje de cabeza de Coronel, corto, dejó el balón en los pies de Belluschi, que de primera quiso vencer a Arias, aunque el arquero -que había salido de su área y quedado a mitad de camino- estuvo rápido de reflejos y desvió el balón. Díficil hablar de merecimientos en tan poco tiempo, pero esa situación sirvió para describir lo que sucedería luego: más por errores ajenos que por aciertos propios, los de Boedo merodearon el gol, pero a último momento se les ahogó el grito.

Fueron de mayor a menor los dirigidos por Biaggio, que tuvieron 25 minutos en un muy buen nivel. Sin embargo, a diferencia de lo que le sucedió a lo largo de varios pasajes del segundo semestre del 2017 (cuando el equipo no jugaba del todo bien pero conseguía resultados), ayer, San Lorenzo tuvo las chances más claras, pero fue ineficaz. En total fueron tres los mano a mano con los que contaron los azulgranas, dos de Cerutti y uno de Blandi. Y ojo: no hubo demasiado mérito de Arias para que no terminaran en gol, sino que en cada una de estas situaciones fueron tanto Pocho como Nico los que fallaron. Con un juego más vertical que horizontal, los de Boedo dominaron a un rival que se vio sometido en el inicio.

Es más: Gimnasia -sin quererlo, claro- hizo todo lo posible para que San Lorenzo marcara un gol. Hubo groseros errores de la defensa platense: en su intención de pararse lejos del arco propio, su última línea quedó escalonada y habilitó en más de una ocasión a los jugadores de enfrente. Fue tan malo el primer tiempo de Gimnasia que ni Alemán se salvó: el Ovejero, acaso el arma más peligrosa del Tripero, falló hasta en los tiros libres, una de sus especialidades. No obstante, los de Boedo sacaron el pie del acelerador. Gimnasia, con poco, igualó las acciones. Y hasta pudo marcar una ventaja que hubiera sido injusta, pero Dibble tardó en definir.

El Pampa movió el banco de suplentes en el complemento. Pero en un principio los ingresos de Moyano, Piris da Motta y Botta no cambiaron demasiado la ecuación, como para darle un poco la razón al DT en su pedido por un refuerzo de jerarquía. Sin embargo, la ventaja llegó para los azulgranas, ya que de tanto jugar con fuego, Gimnasia se quemó. Arias quiso salir jugando con Rinaudo, pero el volante fue atorado por Moyano. La pelota le cayó a Blandi, que asistió de taco a Belluschi para el 1-0 azulgrana.

Gimnasia no reacciónó. Pero, inesperadamente, se encontró con el empate en la última jugada del partido: Torrico le cometió un infantil penal a Alemán, que el propio Ovejero transformó en gol. Luego, en la definición por penales, San Lorenzo festejó con un inesperado Cerutti en el arco por la lesión de Torrico en el último disparo. Tanto San Lorenzo como Gimnasia deben seguir mejorando, claro. No hay mucho tiempo: la Superliga está a la vuelta de la esquina.


Definición por tiros desde el punto penal: San Lorenzo 3 (anotaron Fernando Belluschi, Matías Caruzzo y Ezequiel Cerutti; Alexis Martín Arias tapó el disparo de Rubén Botta); Gimnasia 1 (convirtió Brahian Alemán; Sebastián Torrico contuvo los remates de Franco Niell y Nicolás Colazo; Agustín Bolívar estrelló su tiro en el palo).

Independiente 2 (3) - Racing 2 (1) - Torneo de Verano 2018

RACING PERDÍA 2-0, PERO LO IGUALÓ SOBRE LA HORA; EL ROJO FUE MÁS EFICAZ EN LA SERIE DECISIVA

Independiente ganó en los penales un gran clásico que se le había escapado en el final

Fue un partidazo marcado por la ambición de los dos equipos, que contaron con delanteros cruciales. Leandro Fernández y Lautaro Martínez, imparables, marcaron dos goles cada uno.

Arrancó como para festejar muy fuerte; intuyó un baile, creyó que sería una noche de disfrute absoluto de principio a fin. Pero al poco tiempo comenzó a sufrir. Pasó de dominar a desinflarse en el mismo trayecto, se le escapó una victoria agónica pero, al cabo, mantuvo el aplomo a la hora de la definición y se llevó todas las sonrisas. Independiente venció a Racing por penales en el primer clásico de 2018 y extendió la alegría con la que cerró el 2017.

El fútbol argentino podrá no ser el mejor del mundo, pero nunca será el menos emocionante. Y esa sensación se agranda cuando se juega un clásico. No importa si es en Avellaneda o en Mar del Plata, en este planeta o en otro. Independiente y Racing dieron espectáculo y eso debe celebrarse, más allá del vencedor y las cargadas de turno. Dos técnicos audaces son capaces de poner en cancha a dos equipos ambiciosos y ayer lo demostraron.

Independiente tiene más trabajo que Racing y ahí estuvo la diferencia. En el Rojo, los movimientos salen naturalmente. El entrenador, Ariel Holan, mira el juego con las manos en los bolsillos y casi no grita. Sabe que -redundancia al margen- los jugadores saben. Saben, por ejemplo, que deben atacar por el lado de Alexis Soto; entonces por ahí se gesta el penal del primer gol de Leandro Fernández, el verdugo contemporáneo de la Academia. Entiende, Maximiliano Meza, que debe ir al espacio que deja libre Renzo Saravia y en ese lugar se inicia el segundo gol: desborde, centro y gol. Holan puso en cancha un esquema atípico: 5-1-3-1. Torito Rodríguez se bancó el medio solo; Domingo fue líbero. Independiente invitó a Racing a que lo presionara y utilizó la línea de tres delanteros-volantes para atacar con furia y en bloque. Cada avance del Rojo llevó peligro de gol.

De Racing se vieron cosas buenas y movimientos no aprendidos que demandarán tiempo, ni más ni menos. Eduardo Coudet gritó como pocas veces -lo que ya es todo un decir- en su historia de entrenador. La idea se está gestando. Al Pulpo González le costó encontrar su lugar en la cancha: no sabía si ir contra Domingo o contra Rodríguez. Y en ese pensar se le acabó el primer tiempo. Si el ex Lanús no anda, Racing sufre. Buena primera presentación de Nery Domínguez y el otro Neri -Cardozo- demostró que tiene claridad. Cuando parecía que se venía la noche, Lautaro Martínez cantó presente. Paradojas: Martínez le hizo a Holan un gol con el estilo del hóckey. ¿Cómo? Desvió un centro de Licha López similar a una jugada de córner corto.

El segundo tiempo arrancó igual de intenso que el primero. Pero Racing se plantó mejor e Independiente mostró signos de cansancio bien temprano. Lo tuvo dos veces Lautaro Martínez: en una pifió el desvío luego de otro pase de Licha y en la otra Campaña se quedó con el mano a mano. El seguro arquero uruguayo también evitó el empate de Neri Cardozo, tras un remate lejano.

Se quedó sin piernas en el medio el Rojo y los cambios que ensayó Holan no oxigenaron. El juego se volvió de un solo protagonista: la Academia. Coudet incluyó juventud, pero le faltó lucidez. Fue sin ideas el conjunto del Chacho, aunque fue. Lisandro peleó la última como si fuese la última (grave error de Figal) y Lautaro marcó el empate girando desde el suelo, desde donde sólo los cracks pueden hacerlo. Racing manoteó una vida más, pero no le alcanzó y fue todo rojo.


Definición por tiros desde el punto penal: Independiente 3 (anotaron Maximiliano Meza, Lucas Albertengo y Nicolás Domingo; Juan Musso tapó el disparo de Gastón Silva); Racing 1 (convirtió Diego González; Martín Campaña contuvo el remate de Alejandro Donatti; Enrique Triverio y Lautaro Martínez desviaron sus tiros por encima del travesaño).

Newell's 1 (4) - Banfield 1 (3) - Torneo de Verano 2018

LOS ROSARINOS SE IMPUSIERON 4-3

Newell's acertó en los penales y amargó a Banfield

Empataron 1-1 en los 90 y en la definición el último tiro le quedó a Brian Sarmiento. Y el ex del Taladro no falló.

Oportunismo y un poquito de decisión fueron los argumentos que presentó Newell's pero el festejo lo tuvo en los penales, al ganar la serie 4-3 tras el 1-1 en los 90 minutos. Banfield, deslucido e inexpresivo, tiene la cabeza puesta en el partido del 30 ante Independiente del Valle por la fase preliminar de la Copa Libertadores.

Una trepada fantástica de José San Román por el lateral derecho y el centro preciso para el cabezazo de Luis Leal, pese al intento frustrado de Jorge Rodríguez de despejar la pelota cuando había traspasado la línea. Un gol que a los tres minutos de juego marcó la tendencia para después.

Newell's (con una casaca alternativa, el nuevo modelo y su sponsor los presentará el lunes) repitió la fórmula con envíos aéreos para forzar el error de una defensa indecisa y permeable, que tuvo el debut del paraguayo Danilo Ortiz y extrañó a Renato Civelli, ausente por una tendinitis. Otro cabezazo de Juan Ignacio Sills encontró la buena respuesta de Mauricio Arboleda desde el piso junto a la base del palo izquierdo. Nuevo frentazo del juvenil Joaquín Varela, al promediar la etapa, controlado por el arquero. Y en el cierre, el sorpresivo bombazo de derecha de San Román -desde 35 metros- que se estrelló en el travesaño y una atorada de Arboleda para abortar el intento franco de Leal.

A Banfield le costó tener la pelota, casi no generó riesgo más allá del tiro libre alto de Sperduti y un cabezazo forzado de Darío Cvitanich, y se mostró repetitivo, lejos de esa búsqueda ofensiva que suele proponer. Una preocupación que evaluará Julio César Falcioni (el DT se recupera de la cirugía en la garganta y el miércoles pasó por el predio de Luis Guillón para hablar con el plantel) si su equipo no quiere pasar algún sobresalto a futuro.

La igualdad llegó a poco de comenzar el segundo tiempo, al conectar Cvitanich de palomita al palo derecho el envío de tiro libre de Jesús Dátolo. Lo tuvo Bertolo pero definió con displicencia y Sills llegó con lo justo para frenar la pelota en la línea.

En los penales, celebró Newell's.


Definición por tiros desde el punto penal: Newell's 4 (anotaron Braian Rivero, Joaquín Torres, Juan Ignacio Sills y Brian Sarmiento; Iván Arboleda tapó el disparo de José San Róman); Banfield 3 (convirtieron Jesús Dátolo, Claudio Villagra y Pablo Mouche; Nelson Ibáñez contuvo el remate de Juan Pablo Álvarez; Jorge Rodríguez desvió su tiro por encima del travesaño).

Boca 2 (2) - Aldosivi 2 (4) - Torneo de Verano 2018

VOLVIÓ TÉVEZ, HIZO UN GOL PAVÓN Y ÁBILA TAMBIÉN MARCÓ EN SU PRIMER PARTIDO

Buenas señales, aunque concedió el empate y perdió en los penales

Boca atacó mejor de lo que defendió. No pudo conservar los dos goles de ventaja y Aldosivi aprovechó.

Se presentó en Mar del Plata este nuevo Súper Boca. Y los rivales que lo enfrentarán en este 2018 tienen que saber que van a ser atacados con una intensidad y una potencia pocas veces vista. Si ya era ofensivo, este año con el nuevo esquema y la incorporación de Carlos Tévez y de Ramón Ábila, se acrecienta aún más y gana en potencia. Es que Carlitos empuja mucho, al margen de su fútbol, y Wanchope aporta gol. Aunque, también, los hinchas tienen que saber que Boca sufrirá en defensa cuando lo ataquen. De hecho, anoche, ganaba tranquilo, se confió, se lo empataron y perdió en los penales. Un llamado de atención para el equipo de Guillermo.

Boca tuvo a cuatro jugadores netos de ataque, iban los laterales, se desprendía Nahitan Nández y, a veces, también Pablo Pérez (se retiró lesionado por una molestia en el gemelo izquierdo). Pero por momentos quedaba desbalanceado, sin medio.

Por lo que se vio anoche, con este esquema 4-2-3-1 que Guillermo rediseñó a partir de la vuelta de Tévez, el que vio más alterado su manera de jugar es Pablo Pérez. Antes, el ex Newell's pensaba el fútbol de una manera vertical y ofensiva. Ayer, al tener que hacer el trabajo de Wilmar Barrios, pensó más de manera horizontal y mirando para los costados y para atrás, relojeando los relevos. Y Nandez es un jugador que tiene un despliegue fenomenal pero es desordenado y comete muchas faltas. Por momentos, Boca quedaba partido y ahí le ofrecía espacios a Aldosivi, que casi aprovecha en el primer tiempo pero Emmanuel Mas salvó sobre la línea. Y después llegó al empate por esas ventajas que dio Boca, las que se profundizaron con el ingreso del colombiano Sebastián Pérez, muy errático, y la salida de Pablo Pérez.

Boca ganaba con los goles de Cristian Pavón -como si fuera poco también cuenta con el desequilibrio del cordobés- y de Ábila. Pero el Tiburón reaccionó. Consiguió el descuento, en el complemento, con un estupendo tiro libre de Arnaldo González. Y después, con otro furibundo remate, Cristian Chávez estampó la igualdad para hacer el encuentro aún más atractivo. El ex San Lorenzo encontró esos resquicios que Boca le ofreció para sacar el disparo sin complicaciones. Boca pagó caro sus distracciones y todo terminó en los penales. Ahí, Aldosivi estuvo más certero para llevarse la copa que había en juego.


Definición por tiros desde el punto penal: Boca 2 (anotaron Julio Buffarini y Emmanuel Mas; Sebastián Moyano tapó el disparo de Cristian Pavón; Walter Bou desvió su tiro por encima del travesaño); Aldosivi 4 (convirtieron Arnaldo González, Fernando Telechea, Nahuel Yeri y Esteban Orfano; Agustín Rossi contuvo el remate de Antonio Medina).

Talleres 1 - Belgrano 1 - Torneo de Verano 2018

CON DOS GOLES EN UN FINAL ELECTRIZANTE, LA COPA AMISTAD QUEDÓ SIN DUEÑO

Una multitud en el empate de Talleres y Belgrano

Después de dos años y medio, se jugó en el Kempes con ambas hinchadas. Marcaron Menéndez y Godoy.

Las emociones llegaron al final. En diez minutos, el partido tuvo toda la electricidad que faltó en los otros 80. En el Mario Alberto Kempes, Talleres y Belgrano terminaron a mano. No hubo definición por penales. Así, la Copa Amistad quedó vacante. Quizás, se defina en otro amistoso en el invierno.

Parecía un milagro que alguno de los dos convirtiera un gol. Hasta que Reynoso entró al área de Belgrano por la izquierda y Sequeira lo derribó. Delfino no dudó y pitó penal. Lucas Acosta se lo atajó a Olaza pero Menéndez estuvo más atento que todos y mandó la pelota a la red para el delirio de los hinchas de Talleres.

Parecía cosa juzgada. Es que faltaban cinco minutos y Belgrano jugaba con uno menos desde los 26 minutos del complemento por la expulsión de Cristian Lema. Y estaba replegado tratando de sostener el empate. Pero el gol de Talleres lo hizo reaccionar. Y tuvo una pelota parada a los tres minutos. Centro y gol de cabeza de Godoy. La explosión pasó a la otra tribuna y los piratas se fueron del Kempes más felices, gozando a su rival.

De todos modos, casi se quedan con las manos vacías. Porque Talleres tuvo el triunfo en los pies de Menéndez cuando ya se jugaba el adicional pero su remate salió desviado.

Antes de esa electrizante secuencia, el encuentro se pareció más a un entrenamiento, pero con camisetas, Poco más de 40 mil hinchas entre las dos parcialidades (no había público de ambos clubes en un clásico cordobés desde el amistoso invernal de 2016 cuando también igualaron 1 a 1, pero ahí sí hubo definición por penales y ganó Belgrano). Y lo mejor hasta los 80 minutos estuvo en las tribunas. Afortunadamente, hubo paz.

Al margen de la parsimonia de los dos equipos, Talleres había insinuado un poco más. con los desbordes de Joao Rojas, quien tuvo una chance con un remate. De los pies del ecuatoriano salió lo mejor de la T. Y fue difícil de parar para la defensa Celeste. Belgrano, era fervor y nada de fútbol. Después, hubo temores escénicos y miedo a perder. El clásico venía defraudando hasta antes de esos minutos finales que le dieron un giro brusco. Terminaron igualados pero al menos brindaron algo de emoción.

Huracán 2 - San Lorenzo 0 - Torneo de Verano 2018

FUE 2-0 EN MAR DEL PLATA, CON GOLES EN EL ARRANQUE DEL SEGUNDO TIEMPO

La versión titular de Huracán no perdonó a la propuesta bis de San Lorenzo

Las grandes virtudes de la formación de Alfaro fueron la seriedad y el oportunismo. El equipo de Biaggio tuvo buenos ratos de Botta y de Castro, pero le faltó consistencia defensiva.

El serio y molesto Huracán de Gustavo Alfaro dejó sin invicto al efectivo San Lorenzo de Claudio Biaggio: se impuso 2-0 en el clásico de Mar del Plata. Tuvieron que pasar seis partidos para que el Pampa culmine un juego con derrota, desde aquella caída a principios de noviembre ante Banfield, en el que había sido, hasta ayer, su único encuentro perdido como DT azulgrana. Ayer, los suplentes del Ciclón redondearon un aceptable primer tiempo, pero no supieron reaccionar a los goles del Globo y a la movilidad de Patricio Toranzo, de muy alto rendimiento.

Jugaron sin temores San Lorenzo y Huracán y por eso salió un partido atractivo, especialmente en el primer tiempo. Un ataque por otro, pocos cortes en el medio, muchas corridas. En el Ciclón, Rubén Botta sigue demostrando que tiene un gran verano. Parece que el Pampa le encontró el lugar en la cancha: libre, cerca de delantero centro y sin la responsabilidad de conducir. O sea: Botta como complemento de Pipi Romagnoli y no jugando de Romagnoli, mucho menos por las bandas y sin funciones defensivas. Desde su zurda nacieron las mejores jugadas del elenco de Boedo.

Generó un lindo tiro libre luego de una pared con Moyano (otra de las interesantes apariciones) y habilitó -después de recuperar en la mitad de la cancha- a Alexis Castro para dejarlo mano a mano con el arquero. Sucedió que el volante hizo un control largo y luego Lucas Villalba lo desestabilizó, por lo que Castro terminó chocando con Díaz, que se llevó la peor parte -sufrió un corte en la cabeza-. El golpe entre ambos fue tan fuerte que el partido estuvo detenido por alrededor de diez minutos y, más tarde, el arquero fue reemplazado tras un intento de continuar que no prosperó. Eso sí: en aquella acción, Patricio Loustau debió haber sancionado penal para San Lorenzo por la infracción de Villalba.

Huracán también atacó con mucha gente y se brindó al espectáculo. Ya no salen de memoria los 4-4-2 rígidos de Gustavo Alfaro. Aggiornó su esquema al 4-2-3-1. Ayer, en la cálida noche de Mar del Plata, debutó Tito Noir en el lugar de Romero Gamarra. El ex delantero de Racing no tiene la conducción de Kaku, pero pisa el área con mucha determinación. Tiene movimientos interesantes Noir para llegar a posición de gol. Tendrán que acostumbrarse sus nuevos compañeros a él.

Se dijo: la primera parte fue de ida y vuelta. Los mediocampos sufrieron. Botta le ganó las espaldas a Calello y Bogado; Pato Toranzo a Robert Piris da Motta. En los últimos minutos de la primera parte, el ingresado Manuel García le tapó un disparo cruzado a Castro y, por el lado del Globo, Ignacio Pussetto se encontró con un regalo del juvenil Pereyra y remató por encima del travesaño desde el área menor.

La etapa final arrancó con un gol ni bien comenzó, y a partir de ahí el partido cambió. Martín Nervo le ganó la marca a Coloccini y su cabezazo viajó al gol previo desvío en da Motta. Iban 2 minutos. Al equipo de suplentes de San Lorenzo le dolió el golpe y no pudo reaccionar. Huracán se agrandó y siguió manejando la pelota. Y a los 11, Senesi le cometió un infantil penal a Pussetto que Bogado cambió por gol. Las dudas de San Lorenzo se profundizaron. Biaggio metió mano en el banco pero fue en vano. Botta siguió estando participativo, aunque muy solo desde la salida de Romagnoli. Encima, en las pocas que inquietó, respondió García.

Tanto para uno como el otro, la prioridad estará en la Superliga. Para Huracán, esta victoria significa un gran envión anímico en el medio de la pretemporada. Para San Lorenzo, una mínima señal de alerta: los jugadores de recambio también deberán ajustar sus tuercas.

Racing 0 - Temperley 1 - Torneo de Verano 2018

RACING PERDIÓ 1 A 0 EN UNA FRÍA NOCHE MARPLATENSE

Temperley le amargó el debut a Coudet en la previa del clásico

El entrenador se apoyó en los jóvenes y debe trabajar la idea de juego. El viernes, con titulares, ante Independiente.

Este Racing de Eduardo Coudet, que anoche hizo su presentación como entrenador en la derrota por 1-0 ante Temperley, se tendrá que apoyar mucho en los jóvenes, porque tiene un plantel corto y un calendario apretado. No fue un buen ensayo para la mayoría de los chicos que puso el Chacho, salvo el de Gastón Córdoba. El nacido en Villa Corina hace 17 años ingresó en la segunda parte y con un par de jugadas evidenció por qué lo señalan como la gran esperanza. Por lo demás, Coudet se llevó una certeza: tiene que seguir trabajando la idea de juego. Sobre todo porque a los titulares, que estuvieron en la platea, se les viene el clásico del viernes ante Independiente.

No se notó mucho la mano de Coudet, especialmente en la etapa inicial. Es injusto reclamar que se vea en su totalidad la idea que proclama el DT en el primer partido del ciclo, pero tampoco se percibieron las pequeñas cosas. Y en eso no hay culpas ni en el Chacho ni en los jugadores. El tiempo de trabajo, se sabe, es acotado. Este Racing muletto se pareció demasiado al de Diego Cocca: poco agresivo y poco lúcido para manejar la pelota. Cuestión de herencia.

La expectativa en los hinchas de Racing era semejante a la del entrenador. Estaba con tantas ganas el Chacho, que fue el único que se animó a usar remera de mangas cortas a pesar del frío. Probó con los suplentes el técnico: los quiere observar porque los va a necesitar.

El puesto de volante central es clave (llegó Nery Domínguez) y ayer fue ocupado por el interesante juvenil Kevin Gutiérrez. Le dicen Facha, corre con el tranco de Fernando Gago y tiene un gran primer pase, pero le falta presencia física. Cuando va hacia los costados, pierde más de lo que gana y Temperley entendió rápido que a sus espaldas podía encontrar alegrías. El gol de Juan Ignacio Sánchez Sotelo se inició con Brandán, que aprovechó ese espacio y después Alexis Soto peleó con tibieza la pelota.

Coudet optó por el esquema que más lo seduce: el 4-1-3-2. Pagó Gutiérrez también esa disposición táctica, porque César Meli se vinculó más con los atacantes que con los defensores y el juvenil mediocampista quedó demasiado solo. Un equipo más corto lo hubiese ayudado más. Son cuestiones simples de solucionar; nada para alarmarse.

A los costados de Meli, que participó bastante y no erró tantos pases, se ubicaron Martín Ojeda y Augusto Solari. El zurdo ex Ferro se destacó con algunas corridas y remates desde afuera. A Triverio la pelota le llegó poco y la movilidad de Cuadra tal vez haya sido el punto más destacado.

¿Y la defensa? Floja reacción de Javier García en el único gol del partido. El debutante Héctor Villalba cumplió y Miguel Ángel Barbieri evidenció que se siente un tanto incómodo de segundo central.

Temperley sigue una línea de trabajo y por eso no sorprende el criterio con el que juega. Lo hace bien, intenta atacar con mucha gente y busca ser protagonista. Las 5 mil personas que colmaron la popular disfrutaron del primer amistoso de estas características en la historia del club a pura algarabía. Y se llevaron el premio de la victoria merecida, que pudo haber sido más abultada de no ser porque el Celeste desperdició un par de contraataques peligrosos en el segundo tiempo. Con Gastón Esmerado en el banco, Temperley sigue sin perder y aferrará a eso sus ilusiones de permanencia.

Boca 2 - Godoy Cruz 3 - Torneo de Verano 2018

DERROTA XENEIZE EN EL PRIMER AMISTOSO DEL AÑO

El Boca suplente fue menos que Godoy Cruz y varios estuvieron lejos de su nivel

Los mendocinos se mostraron superiores en el PT y se pusieron 2-0. Después, los de Guillermo tuvieron chances para igualar. El local hizo el 3-1 en su peor momento.

Se sabe: Boca va por todo en este 2018, y está armando un equipo acorde a las exigencias, con la Copa Libertadores como máximo deseo. Sin embargo, en su primera prueba de este año, al equipo de Guillermo Barros Schelotto las dudas les ganaron a las certezas. Es que si bien el Mellizo utilizó anoche un 11 alternativo ante Godoy Cruz, la mayoría de esos que el día de mañana servirán como recambio de los titulares estuvieron lejos del rendimiento esperado.

En Mendoza debutó el esquema que Barros Schelotto pensó para este año, pero los intérpretes que le darán forma al 4-2-3-1 cuando se juegue por los puntos quedaron en Buenos Aires. Y la prueba fracasó en el primer tiempo, cuando Boca sufrió demasiado ante el intenso Godoy Cruz, que lo superó durante la primera mitad en todos los sectores de la cancha. Fue un espejismo esa asistencia de Gonzalo Maroni para que Cristian Espinoza reventara el palo cuando el partido recién arrancaba. Luego, el equipo mendocino se adueñó del desarrollo y fue mejor porque, pese a ser el debut de Diego Dabove como técnico, pareció saber a que jugaba.

Boca fue un equipo muy largo y lo sufrieron los debutantes Buffarini y Más, los laterales que no tuvieron ayuda y quedaron expuestos ante la velocidad de los extremos de Godoy Cruz. Para ellos también fue un examen difícil ante la chance de quedarse con el puesto en la dura competencia interna que tendrán con los hoy titulares Jara y Fabra.

Cuando Godoy Cruz comenzaba a triangular y a mover de un lado a otro la pelota, recuperarla en el mediocampo fue una tarea complicada para Boca. En esa zona, donde Sebastián Pérez y Nández se vieron superados por la movilidad y precisión de los jugadores del Tomba, se empezaba a gestar el dominio del local, que luego se extendía a lo largo de los metros. Fueron 45 minutos complicados para jugadores a los que seguramente les costará sumar minutos en partidos oficiales. ¿Cuántas nuevas chances tendrá Vergini? Serán pocas si repite acciones como en el primer gol de Godoy Cruz, cuando fue sorprendido por un pelotazo largo y ensayó una defensa muy tibia ante la jerarquía de Santiago García. ¿Podrá Walter Bou competir con Ábila o Tévez si desaprovecha situaciones tan nítidas? La respuesta está cantada.

Las incógnitas siguen. ¿Será el colombiano Pérez una alternativa para su compatriota Barrios o para Pablo, el otro Pérez del plantel? En Mendoza se notó su falta de ritmo y, al margen de su buen pase, quedó lejos de la jugada varias veces. ¿Espinoza logrará achicar la brecha que existe con Pavón? Más allá de algunas buenas acciones en el complemento, cada vez hay más distancia entre los extremos. Lo mismo se puede decir de Junior Benítez, que pasó desapercibido, en comparación con Cardona. ¿Sara hará dudar al Mellizo? Su falta de reacción en el tercer gol de Godoy Cruz, cuando se quedó clavado en la línea del arco y permitió que le definieran en el área chica, puede dejar tranquilo a Rossi.

El que más aprovechó la posibilidad fue Maroni. El juvenil, parado en el lugar que será de Tévez, fue claro con la pelota, inteligente para buscar los espacios y lastimó cerca del área rival. Marcó el primer gol, fue clave en el segundo y dejó una gran impresión pensando en el futuro.

En el segundo tiempo Boca mostró otra cara. Nández se soltó, Buffarini clausuró su sector y la pelota fue propiedad exclusiva del visitante. Del otro lado Godoy Cruz bajó mucho la tensión y, sin el balón, dejó expuestos sus problemas para defender. El puntero de la Superliga manejó mejor el balón y dispuso de situaciones para revertir el resultado. Le volvieron a convertir en su momento más favorable. No le alcanzó y el Mellizo se habrá ido con algunas dudas.

Rosario Central 1 (8) - Lanús 1 (7) - Torneo de Verano 2018

BUEN DEBUT DE ORTIGOZA

Central le sacó una pequeña ventaja a Lanús en los penales

Se impuso por 8 a 7 luego del empate 1 a 1 en los 90 minutos.

Lanús y Rosario Central pusieron en marcha su 2018. El equipo rosarino se impuso 8-7 en los penales tras empatar 1-1 en los 90 minutos. Ambos afrontaban este amistoso con grandes alicientes. Lanús, con el debut de Ezequiel Carboni en el banco de suplentes luego del exitoso ciclo de Jorge Almirón. En Central, las miradas estaban puestas en la presentación de Néstor Ortigoza.

El ex San Lorenzo no defraudó: asumió el rol de líder y conductor de su equipo. Habló, ordenó e hizo jugar, con la 10 en su espalda. Mostró lo mejor de su repertorio a los 26 del complemento con un profundo pase para Zampedri, quien habilitó a Ruben para el empate. Siete minutos antes de eso, Lanús había sacado ventaja a través de un buen cabezazo del juvenil Tomás Belmonte.

El Granate intentó continuar con el estilo de juego desarrollado por Almirón: pelota al piso, salida limpia desde el fondo y explosión por los costados. Si bien dominó en el primer tiempo, le faltó profundidad. En la segunda parte Central mejoró, asumió el protagonismo y casi lo gana a lo último. Al final, al partido le calzó bien la igualdad.


Definición por tiros desde el punto penal: Rosario Central 8 (anotaron Leonardo Gil, Germán Herrera, Fernando Tobio, Paulo Ferrari, Federico Carrizo, Mauricio Martínez, José Luis Fernández y Andrés Lioi; Maximiliano González estrelló su tiro en el travesaño); Lanús 7 (convirtieron Fernando Barrientos, Marcelo Herrera, Gastón Lodico, Joel Martínez, Leonel Di Plácido, Gonzalo Di Renzo y Tomás Belmonte; Jeremías Ledesma contuvo los remates de Lucas Vera y Nicolás Thaller).

Independiente 0 (3) - Gimnasia 0 (5) - Torneo de Verano 2018

AMISTOSO DE VERANO EN MAR DEL PLATA

El Independiente suplente dejó buenas sensaciones, aunque no tuvo gol y lo pagó

Gimnasia le ganó 5-3 por penales tras un empate sin goles. Debutaron Romero y Brítez en el equipo de Holan, que ensayó un esquema distinto y fue algo más.

Independiente no pudo arrancar el 2018 como terminó el anteror: con una Copa. Anoche, cayó por penales aquí en Mar del Plata ante Gimnasia después de igualar sin goles en un típico duelo veraniego. El resultado es anécdota. Los minutos que tuvieron los habituales suplentes le son necesa- rios a Ariel Holan para sacar conclusiones. El técnico entiende que, para lograr el objetivo principal de la Copa Libertadores, necesitará sí o sí de todo el plantel.

Hay idilio entre los hinchas de Independiente, el equipo y el entrenador. La obtención de la Sudamericana en el Maracaná y la recuperación de su mística histórica lo hicieron posible. Por eso, en la fría noche de Mar del Plata, todo parece al comienzo salido de un sueño maravilloso para el Rojo. Los aplausos bajan desde las tribunas del José María Minella.

Se reconoce al debutante Emanuel Brítez, que va a trabar fuerte con Lucas Licht (salió lesionado en la rodilla izquierda); hay aprobación unánime cuando Jonás Gutiérrez intenta un pase de crack; todos sacuden el puño al viento cuando Lucas Albertengo guapea con los centrales de Gimnasia. Pero, fundamentalmente, se ovaciona cuando el equipo se asocia y logra un par de pases rápidos, firmes y de primera. Ahora que el Rojo se sacó el peso de tantos años sin títulos y dejó atrás a viejos fantasmas, buscará profundizar lo mucho de bueno que realizó en el semestre pasado y volver a ser protagonista de la Copa Libertadores. La idea es clara: jugar mejor para ser mejor.

Holan se fue sin irse de Independiente, pero ayer cambió un poco su libreto. Está probando el DT. Anoche optó por un dibujo distinto: 4-3-3. Sin Ezequiel Barco, en el Rojo debutó como extremo Braian Romero. Jugó por derecha y le costó acomodarse; en Argentinos se movía por la otra banda o de nueve. Por izquierda se paró el Burrito Martínez y llamó la atención que no alternaran posiciones. La referencia fue Lucas Albertengo. En el medio, Domingo fue el tapón y a sus costados, Jonás y Domingo Blanco. No generó grandes ocasiones el elenco de Avellaneda, pero jugó suelto, confiado. Intentó manejar la pelota.

Holan tiene que sacar conclusiones urgentes para saber si puede contar con el recambio para afrontar las múltiples competencias: Libertadores, Superliga, Recopa, Suruga, Copa Argentina. Y las sensaciones ante el Lobo no fueron malas, más allá de la derrota en los penales.

Gimnasia modificó a su entrenador, pero no demasiado la idea. La diferencia más visible es que Facundo Sava no pretende salir jugando en todas, como insistía Mariano Soso. Igual, se notó la mano del renunciante entrenador rosarino: el central Manuel Guanini le metió un caño delicioso a Jonás y su compañero de zaga se despachó con un doble taco hermoso. ¿Conclusiones del juego? Brahian Alemán sigue en buen nivel y Fabián Rinaudo siempre es una garantía. Habrá que ver cómo responden el resto de los intérpretes. Anoche no pesaron los delanteros y casi que no fabricó situaciones. Sólo inquietó con pelotas paradas.

De un primer tiempo interesante se pasó a un complemento para el olvido. Guardó energías Independiente y ya no fue tan ambicioso. Se cansó Jonás y el fútbol dejó de fluir. Apenas inquietó con un tiro libre del uruguayo Silva que fue a las manos de Martín Arias. Gimnasia siguió apostando al contraataque y tuvo las más claras desde los pies de Alemán. Así llegaron a los penales, a las únicas emociones. Y sonrió Gimnasia.


Definición por tiros desde el punto penal: Independiente 3 (anotaron Gastón Silva, Emanuel Brítez y Lucas Albertengo; Christian Ortiz tiró su remate por encima del travesaño); Gimnasia 5 (convirtieron Brahian Alemán, Franco Niell, Lorenzo Faravelli, Ezequiel Bonifacio y Omar Alderete).

San Lorenzo 2 - Argentinos 1 - Torneo de Verano 2018

GOLES DE BLANDI Y EL PIBE MOYANO PARA DERROTAR A ARGENTINOS EN EL NUEVO GASÓMETRO

El San Lorenzo de Biaggio siguió con su costumbre de ganar sin convencer

Volvió a depender en demasía de Belluschi y mostró poco. González anotó para Argentinos, que mereció algo más.

La pregunta debe taladrar la cabeza de Claudio Biaggio. ¿Qué le pasaría a su San Lorenzo si Independiente, finalmente, se decidiera a pagar los más de siete millones de dólares que pide Matías Lammens para sentarse con Hugo Moyano para negociar la transferencia de Fernando Belluschi? El Pampa, y todo Boedo, lo tiene claro: aun en los días nublados -tanto en el cielo del Nuevo Gasómetro como en el juego azulgrana-, el volante es de esos que clarifican las ideas con la pelota en sus pies. El ex Newell's juega y hace jugar, y con un par de pinceladas le alcanza para destacarse entre los 22 jugadores que pisan el césped. Ayer, en definitiva, sucedió una vez más: Belluschi volvió a ser el jugador más lúcido de un San Lorenzo al que le costó mucho superar a Argentinos, que mereció mejor suerte.

Ya es una constante del equipo del Pampa: aparecen los resultados, no así el juego. Al igual que en los últimos meses del año pasado, a San Lose renzo le costó encontrar un funcionamiento aceitado en este segundo amistoso de la pretemporada, el primero en el que el DT utilizaba titulares (ante Defensa y Justicia, el jueves, jugó un once alternativo). La baja a último minuto de Facundo Quignón -contractura- hizo que en el medio debutara el pibe Emanuel Maciel (20 años), mientras que en el arco Sebastián Torrico reemplazó al lesionado Nicolás Navarro. El resto, los mismos de siempre de Biaggio, con ese 4-3-1-2 que tanto le gusta.

Pero estuvo incómodo el local, a tal punto que la chance más clara del primer tiempo fue un tiro libre de Paulo Díaz que Lucas Chaves envió al córner. Después, poco y nada. Algún pase entre líneas de Belluschi que puso a correr a Ezequiel Cerutti y no mucho más para San Lorenzo. Es que sin socios en el medio -ni Gudiño, ni Mercier ni Maciel se sintieron cómodos con el balón-, el 16 azulgrana quedó demasiado solo en la elaboración. Enfrente, para complicar un poco el panorama, Argentinos demostró que cada vez se siente más cómodo con la idea de Alfredo Berti. Su 4-3-3, con dos extremos bien abiertos, complicó a su rival.

Sin embargo, así como San Lorenzo consigue resultados sin merecerlos, a los de La Paternal le sucede lo inverso: juega mejor que el equipo que tiene enfrente, pero no lastima. Todo lo bueno que el visitante realizó en la mitad de la cancha -con el veterano Gastón Machín multiplicándose cerca del círculo central- se diluyó cuando el arco de Torrico se hacía cada vez más chico. Y si a eso se le suma la falta de efectividad cuando un jugador propio quedó mano a mano... El uruguayo Javier Cabrera fue el que más lo sufrió: estuvo cara a cara con el Cóndor en dos ocasiones, pero en una su remate se fue por encima del arco y en la otra se estrelló en el travesaño.

En el segundo tiempo, Berti sacudió el banco de suplentes: hizo siete modificaciones, buscando aprovechar al máximo este amistoso y darles minutos a sus jugadores. Bajó la intensidad Argentinos, y San Lorenzo aprovechó. Belluschi encontró más espacios y la defensa de La Paternal perdió solidez. Así, llegó el primero: el preciso centro del 16 encontró la cabeza de Blandi. Luego, el juvenil Franco Moyano aprovecharía el desorden de Argentinos para estirar la ventaja. Sobre el final, el descuento de Nicolás González apenas decoró el resultado.

¿Seguirá Belluschi en Boedo? Las próximas horas serán clave. Pero quedó claro: si se va, el problema será enorme para un equipo que depende demasiado de su fútbol.

Atlético Tucumán 0 (4) - Talleres 0 (3) - Torneo de Verano 2018

LE GANÓ 4-3 A TALLERES DE CÓRDOBA, TRAS UN ABURRIDO 0-0 EN LOS 90 MINUTOS

En los penales, festejó Atlético Tucumán

La ejecución impecable en la tanda de los penales -acertó sus cuatro remates, atajó uno y su rival malogró el último- le permitió a Atlético Tucumán tener su primer festejo en el año. Superó 4-3 a Talleres de Córdoba, tras igualar 0-0 en el tiempo reglamentario, para llevarse la Copa Salta.

Con el foco puesto en la reanudación de la Superliga este amistoso les sirvió a los jugadores a sumar sus primeros minutos de fútbol, tras una primera semana de trabajo físico y para los entrenadores, el ensayo de algunas cuestiones tácticas. Atlético presentó el debut en el arco de Augusto Batalla, dispuesto a dejar atrás un semestre cargado de dudas que lo relegó en River. Talleres presentó a Bebelo Reynoso como su nuevo capitán, por primera vez titular a Nahuel Tenaglia -21 años, ex Atlanta- en el lateral derecho por la baja de Leonardo Godoy (operado de meniscos de la rodilla izquierda) y el ingreso de Jonathan Menéndez por Sebastián Palacios, quien emigró a Pachuca.

Se mostró más incisivo Atlético, que al menos generó tres opciones claras. La primera, al minuto de juego, con un cabezazo del Pulga Rodríguez a colocar, arriba del palo derecho. Otra intervención picante del delantero y referente tucumano, que abortó Herrera al despejar con los puños. Y a poco del cierre de la etapa inicial, la peinada de Ismael Blanco, ganándole en el salto a Lucas Olaza, para impactar la pelota en el travesaño.

Talleres reguló energías y tuvo su chance con un zurdazo de Olaza que se fue cerca del palo derecho. La cabeza, claro está, la tiene en el clásico ante Belgrano que se jugará el miércoles a las 20 en el estadio Mario Kempes, con ambas hinchadas.