Racing 2 - Botafogo (Brasil) 0 - Recopa Sudamericana 2025
QUEDÓ A UN PASO DE GANAR EL TÍTULO INTERNACIONAL
Con la potencia de sus delanteros, Racing barrió a Botafogo y desató la fiesta de los hinchas en Avellaneda
A Maravilla le hicieron el penal que convirtió Vietto. Luego definió con calidad una pared con Salas. El 2-0 le da a la Academia una ventaja importante para buscar el título en Río de Janeiro.
Racing fue muy superior desde la actitud en el capítulo que abrió el juego y terminó siendo abrumador desde el aspecto estrictamente futbolístico en el complemento. Con la pelota larga como principal arma y un gran despliegue físico, empujó a Botafogo contra su arco.
Consciente de que la magnitud del partido, Costas apeló a Bruno Zuculini de entrada y relegó a Agustín Almendra. Y en este contexto, Racing tuvo las situaciones más claras con Maximiliano Salas y Adrián Martínez como grandes protagonistas. Si no llegaron antes al gol fue por las manos de John.
Racing era más que Botafogo que, a esa altura, había empezado a manejar mejor la pelota a partir de Allan y Marlon, los volantes centrales. Sin ir más lejos, tuvo un mayor porcentaje de posesión. Pero llegó uno de los tantos pelotazos largos desde el fondo y Barboza cometió un error de principiante. El ex Independiente le pegó un codazo en la cara a Maravilla. El árbitro Felipe González, de frente a la jugada, dejó seguir. Era un error muy grande del chileno que corrigió el VAR. Vietto, con personalidad y categoría, clavó el gol.
Se lesionó el “10” después de su ejecución y tuvo que ser reemplazado por Zaracho. Botafogo atacó con algunas triangulaciones y buscó a Igor Jesús. Racing se aferró en el orden, bien compacto, muy a pesar de algunas faltas de Zuculini. Cuando los brasileños se filtraron por el sector de Rojas y Santiago Quirós no se mostraba como una garantía, apareció Nazareno Colombo para cruzar. Y ganó siempre.
En el segundo tiempo, Racing salió con la misma postura. Y fue avasallante. Lo encerró a Botafogo con el impulso de su juego directo.
Los cariocas estaban desbordados. Capaca mandó a la cancha a Ewuan para acompañar a Igor Jesús y prescindió de un volante. Racing se replegó, en algunos casos peligrosamente, pero sus atacantes fueron dos leones. Y en un contragolpe, lo liquidó. Primero recuperó Colombo; después, combinaron Maravilla y Salas con dos paredes sensacionales y una definición de manual del “9”.
Racing buscó cerrar la serie y no le dio respiro a Botafogo. Entonces, volvieron a combinar Maravilla y Salas, pero Nardoni definió apenas alto cara a cara con John. Y al ratito, por fin pudo pisar el área Martirena, de gran protagonismo en la segunda etapa, pero el arquero brasileño tapó el disparo del uruguayo abajo y Salas, con el arco a su merced, también remató por encima del travesaño. Martínez tuvo otra dos chances claras, un cabezazo que pegó en el techo de la red, y un mano a mano que otra vez ganó el número uno nacido en San Pablo.
Tan conforme estaba Costas con el equipo que recién hizo el segundo cambio cuando quedaban cinco minutos del epílogo. Fue un mimo para Salas, que se ganó la ovación. Casi en simultáneo, Cuiabano se fue expulsado por pegarle una patada en la cara a Colombo.
Y llegó el final, con la sensación de que podía haber sido más abultado el resultado. Señal de un equipo con hambre de gloria que irá por otro trofeo a la tierra carioca.