Rosario Central Campeón Copa de la Liga Profesional 2023
EL CANALLA FESTEJÓ EN SANTIAGO DEL ESTERO
Central le ganó a Platense con un golazo, es el campeón de la Copa de la Liga y jugará otra final con River
Maximiliano Lovera, un acierto de Miguel Ángel Russo, marcó la diferencia con una obra maestra. El Calamar estuvo a la altura. El viernes, el Canalla disputará el Trofeo de Campeones.
Todos los colaboradores del cuerpo técnico y los suplentes estaban al borde de la línea de cal y cruzaron en lo más alto sus brazos pidiendo la hora. Parecía una coreografía de ansiosos. En el medio de la fila había un hombre más pequeño, con los hombros caídos y las manos en los bolsillos. Era la pintura de un sabio sereno. Para cuando Nicolás Ramírez pitó el final, Miguel Ángel Russo fue abrazado por todos: Rosario Central, su equipo por adopción, le ganó 1-0 a Platense y se consagró campeón de la Copa de la Liga. “Y ya lo ve/es el equipo de Miguel”, fue el primer cántico de los hinchas rosarino. Y fue un mimo merecido para el técnico de 67 años, que rápido se sentó en el banco de suplentes para que los protagonistas sean los otros.Y en el duelo decisivo, Miguel metió mano con el inesperado ingreso de Maximiliano Lovera y se hizo notar. Necesitaba su historia en Central un título en competiciones de Primera División, porque el DT ya había festejado en la B Nacional en 2013. Ayer, Russo completó 268 partidos dirigiendo al Canalla -es el segundo en la lista, por detrás de Don Ángel Tulio Zof, con 608- y esa experiencia le cantó que Lovera podría ser fundamental. No le falló la intuición a Miguel: el mediocampista dibujó un golazo y fue la figura en la calurosa noche de Santiago del Estero.
No le pesó la final a Platense y eso no es poco decir. Se plantó el elenco que comanda Martín Palermo a jugar la final en el Madre de Ciudades e impuso su idea de replegarse y salir largo o de contra. Por el contrario, Central tardó más tiempo en aclimatarse, más allá de la fiesta que hicieron sus hinchas en el 70 por ciento del estadio que estuvo colmado de rosarinos. Las mejores sensaciones las regaló el Calamar en la etapa inicial, pero fue el Canalla el que pegó primero.
Le quedó más cómodo el trámite a Platense porque Rosario Central debió asumir el protagonismo con la pelota, cuestión que no le había sucedido en los cruces ante Racing y River. El conjunto de Miguel Ángel Russo también está formateado para contragolpear. Prevaleció entonces Platense e inquietó con un par de disparos de Agustín Ocampo y con un cabezazo de Mateo Pellegerino.
Y Central empezó a hacerse dueño de verdad cuando Ignacio Malcorra agarró la pelota bien plantado de enganche y con menos obligaciones defensivas. El zurdo estuvo atento a recibir a espalda de los volantes centrales rivales y desde ahí creció su equipo. Hubo buenos encuentros con Campaz y Lovera.
La tuvo Agustín Sandez con un cabezazo claro que culminó en las manos de Macagno. Y a los 39 minutos, la obra maestra de Lovera, ese talento porque el que apostó Miguel: la tomó en el centro y se metió al área con un caño a Vázquez para definir de zurda y cruzado. Un golazo que hizo estallar a los rosarinos, a esa altura un poco preocupados por el andar del partido.
El segundo tiempo comenzó con el duro choque entre Pellegrino y Mallo; el atacante de Platense se fue directo al hospital en ambulancia por un fuerte corte en la nariz. Y al Calamar le costó salir de ese impacto porque fue realmente duro.
Pero fue con corazón Platense, dejando espacios. Tuvo varias y hasta tal vez mereció empatar. Central volvió a desperdiciar muchas contras. Fatura Broun le sacó una del ángulo a Zalazar y un cabezazo a Picco. En la última, una media vuelta de Servetto se fue al lado del palo. La suerte estaba con Miguel. Sí, Russo se lo merecía tanto como Rosario Central.
¡¡Felicitaciones Canallas!!