River 0 - Vélez 0 - Copa Libertadores 2022
EL EQUIPO DE LINIERS SE ENCONTRARÁ CON TALLERES EN LA PRÓXIMA RONDA
El VAR fue decisivo y Vélez echó a River de la Libertadores en medio de la polémica
El árbitro Tobar anuló un gol a Suárez, por mano, cuando lo llamaron a revisar la jugada. El 1-0 de la ida y aguantar en Núñez le alcanzó al Fortín para pasar a los cuartos de final.
Vélez, que llegó de punto a la serie de octavos de final, hizo saltar la banca en el Monumental. Aguantó el 1-0 logrado en el Liniers hace una semana y ahora jugará por los cuartos de final de la Copa Libertadores con Talleres. Es cierto que el planteo del Cacique fue bastante especulativo, pero aun así tuvo cinco chances de gol y en el global de los 180 minutos fue el mejor de los dos, aunque sufrió demasiado para festejar a lo grande ante la desazón de los hinchas de River.Eso sí, quedará la discusión por un largo rato tras la polémica generada por el gol anulado a Matías Suárez a instancias del VAR. Mucho peor, los más de cinco minutos que estuvo el chileno Roberto Tobar mirando la jugada, con tantas dudas que llamó a su asistente -algo que reglamentariamente puede hacer- para finalmente, anular el gol. Y también, esa última jugada del uruguayo Diego Godín sobre Beltrán, que todos reclamaron penal pero que no necesitó de revisión.
Después de dos derrotas seguidas, el miércoles pasado en Liniers en la ida y el domingo ante Huracán, Marcelo Gallardo decidió meter mano en la defensa. Milton Casco pasó al lateral derecho, ingresó Jonatan Maidana como primer marcador central, Paulo Díaz como segundo y Elías Gómez por izquierda. Pero la mayor sorpresa fue la ubicación de Rodrigo Aliendro, por el centro, detrás del doble cinco velezano.
El ex jugador de Colón fue el más claro del equipo desde el inicio del partido. A los dos minutos, se animó a encarar por el centro, tocó justo para Braian Romero, el nueve tocó al gol, pero la pelota se fue besando el palo izquierdo de Hoyos. Fue un aviso para Vélez, que debía ajustar marcar y renovar la intensidad.
River hizo todo el gasto, manejó la pelota porque el equipo del Cacique Medina se desentendió de ella. Apostó al pelotazo largo, a la velocidad de Luca Orellano y Lucas Janson, y a la potencia de Walter Bou y Lucas Pratto. Con esa fórmula contó con dos buenas situaciones, ambas controladas por Armani, más sencilla la de Bou que la de Janson, que la tuvo que tirar al córner.
La otra cuestión que no pudo resolver fue el bloque defensivo visitante, muy firme la línea de cuatro y enorme despliegue de los volantes. Por momentos, todo lo bueno que hacía Aliendro lo resolvía mal Romero. Cuando abría la cancha por derecha, Casco no podía con el perfil cambiado; cuando lo hacía por izquierda, los centros de Elías Gómez no tenían destino. La superioridad se diluía en el área de Hoyos.
La parte final no cambió el panorama. Otra vez a los dos minutos se lo perdió River, tras un remate de Julián Álvarez que encontró la pierna de De Los Santos y la pelota se fue al córner. Además, a los nueve minutos, Vélez jugó rápido un lateral, Orellano entró solo, pero definió débil ante Armani. En 55 minutos, River, dominador amplio, nunca logró probar a Hoyos. Vélez, en cambio, tres veces había exigido a Armani.
Por la inercia propia del juego, el Millo otra vez estuvo cerca, primero con un remate que encontró un pie y se fue al córner y después con un disparo de De La Cruz se fue apenas desviado. De ahí en más hasta los 31 minutos, cuando Osorio se lo perdió mano a mano ante Armani, Vélez tenía controlado el juego.
Pero algo le funcionaron los cambios a Gallardo. Más fresco, Barco logró superar a Ortega, sacó un centro bárbaro pasado para la entrada goleadora de Suárez. Y después, lo de siempre, con VAR o sin VAR, el fútbol siempre tiene espacio para la polémica, para la discusión, para la bronca, para la desazón, para la euforia y para que de vez en cuando el que se supone más débil se quede con el premio mayor.
Entre tanta intensidad y nerviosismo en los tramos finales del partido, con River buscando un gol que le permitiera definir todo en los penales, con los jugadores de Vélez peleando cada pelota como si fuera la última, quedó opacada la despedida de Julián Álvarez, quien después de 122 partidos, 54 goles y 30 asistencias con la camiseta de River, viajará este jueves o viernes a Inglaterra, donde el domingo será presentado oficialmente en el Manchester City.
Con esta clasificación a cuartos de final, el primer semestre de Vélez empieza a quedar en el pasado. La salida de Mauricio Pellegrino, el interinato salvador de Julio Vaccari, con esa clasificación heroica ante Nacional en la última fecha y este batacazo que disfrutará por largo tiempo.