River 1 - Argentinos 1 - Copa Libertadores 2021

LOS OCTAVOS DE FINAL EMPEZARON EN NÚÑEZ CON UN ATRACTIVO 1-1

Argentinos le sacó un empate a River y lo dejó comprometido para la revancha

Fue 1-1 en el Monumental y la semana próxima juegan en La Paternal. El gol de visitante puede pesar. Buen partido y duelo de DT de elite. Gallardo sigue con racha negativa ante Milito.

Lo que se suponía ocurrió en la fresca noche copera del Monumental: Argentinos es un equipo duro, dispuesto a dar batalla. Así, la ida de los octavos fue empate 1 a 1 y los de La Paternal se fueron más alegres por el gol de visitante. Se define la semana que viene en el Diego Maradona.

Fue un juego de dos entrenadores de élite (quinto partidos entre ambos con 3 triunfos de Milito, uno de Gallardo y ayer fue el primer empate) y conviene celebrar que existan en el fútbol argentino técnicos de esa categoría, que se brindan y que favorecen el espectáculo. Ataca el River de Gallardo y va al frente el Argentinos de Milito. Regalaron un atractivo duelo, en definitiva, con emociones y jugadas pensadas y ensayadas.

Con razón se dice que en un partido los equipos tienen sus momentos de alta y de baja, y que deben aprovechar unos y aguantar los otros. Arrancó con todo Argentinos, metido, presionando arriba la salida de River, con Milito al borde de la cancha pidiendo intensidad. E incomodó al local el Bicho, que se plantó a jugar cerca de Franco Armani con un 5-2-3 bien ofensivo. Pero el que marcó en ese lapso fue River, con una jugada de pizarrón que inició Paulo Díaz, continuó Braian Romero y definió Matías Suárez a un toque.

Fue de laboratorio el gol de River porque llegó como lo pensó Gallardo. Por eso Díaz y Enzo Pérez fueron a abrazar al DT en el gol del cordobés. Jugó con un esquema raro River: 4-3-2-1. Y Suárez fue la referencia, con Romero y Álvarez por detrás. Lo que pensó el Muñeco fue jugar rápido a atrás de los centrales. Suárez se plantó al lado del libero Torren y corrió a la espalda de Quintana y Mac Allister, que estaban con los restantes atacantes. Fue vertical el local, de transición rápida. En el gol, Díaz vio el movimiento de Romero, que realizó una gran jugada para el gol del Suárez. Iban 9 minutos.

Mejoró River a partir de gol. Encontró varios pases y halló espacios para correr. Lucas Chaves le tapó dos manos a manos notables a Suárez. El segundo, hay que decirlo, valió tanto como un gol porque el atacante había quedado solo tras un gran pase de Gonzalo Montiel.

Siguió mordiendo Argentinos, aún cuando sufría los mejores pasajes de River. Lo que hace el Bicho es presionar de verdad (ahogó a Enzo Pérez). Y salir rápido para que Avalos descargue y aparezcan de sorpresa los laterales. El visitante también golpeó en el momento que peor la pasaba, aunque es cierto que River había bajado un poco. Le convirtieron de un lateral al millonario y se debe lamentar por eso el Muñeco. Jonathan Gómez sacó un centro pasado con libertad, Sandoval le ganó a Casco y Hauche la desvío en la nariz de Armani, que nada pudo hacer.

En el segundo tiempo, Argentinos se replegó y dejó de presionar. Tal vez se conformó con el gol de visitante que ya había logrado. La posesión fue de River, pero no estuvo fino. Gallardo mandó a la cancha a Carrascal, Enzo Fernández, Angileri y Girotti y modificó a un 4-3-3. Lo que buscó fue más simple: desbordar para definir por dentro con Girotti.

Y por algo había pensado otro partido Gallardo. River se repitió en envíos y crecieron las figuras de Torren y Quintana, esos centrales que son garantía. Los que volvieron de los seleccionados (Montiel, Álvarez y principalmente De La Cruz) evidenciaron algo de cansancio, pero River fue. Puede jugar mal equipo de Gallardo, aunque nunca dejará de ir. Y de tanto intentar tuvo una clara: a Girotti la pelota le quedó obediente en la medialuna y el remate potente se fue besando el ángulo derecho.

Fue empate, nomás. Y lo que viene parece que será emocionante.