Racing 1 - Flamengo (Brasil) 1 - Copa Libertadores 2020
UN GOL DE LISANDRO LÓPEZ MAL ANULADO PUDO HABER CAMBIADO LA HISTORIA
Racing se le plantó al campeón y la definición quedó abierta
El local mostró una imagen distinta a la del torneo local y complicó a los brasileños. La revancha, el martes.
Después de la tormenta interna que provocó la renuncia anticipada de Diego Milito, Racing necesitaba un resultado esperanzador. El empate ante Flamengo, entonces, deja sabor a poco por eso gol brasileño que condiciona. El rendimiento, en cambio, vigoriza las posibilidades. Por más que tenga que definir la serie en la casa del campeón de América, se plantó en el Cilindro, jugó de igual a igual y no lo ganó porque el árbitro venezolano anuló el grito ganador de Lisandro por una falta inexistente del chileno Eugenio Mena.Beccacece conocía las fortalezas de Flamengo de mitad de cancha hacia adelante. También, las debilidades de su propio equipo, que había perdido la solidez en el ámbito doméstico. Por eso apostó a una línea de cinco en el fondo y ubicó a Alexis Soto y Fabricio Domínguez en puestos poco naturales para ambos. El lateral jugó de stopper por izquierda y el volante, de marcador de punta por derecha.
La idea era desplegarse en ataque, dejar tres centrales y lastimar por afuera. En ese sentido, Fabricio Domínguez fue las dos caras de la moneda. Esplendoroso en función ofensiva, muy poco confiable para retroceder. Y si en el gol de Héctor Fértoli mostró una gran capacidad de desequilibrio para sacarse tres rivales de encima, en el empate de Gabigol quedó pagando. Porque a su espalda y de frente tuvo que lidiar, ni más ni menos, con Bruno Henrique.
En apenas dos minutos, entonces, Racing viajó de la euforia por ese golazo que nació en los pies de Domínguez a la desazón que provocó el grito brasileño. De ese slalom del uruguayo que dejó en el camino a Gerson, Filipe Luis y Leonardo Pereira para meter el centro atrás cuando encaró a René a ese pase largo que recibió Bruno Henrique, quien ridiculizó al otro Domínguez, y desembocó el 1 a 1 por obra y gracias de Gabigol.
Racing se dejó ver muy distinto a aquel que perdió el rumbo en la Liga Profesional. Más intenso, presionó la salida de Flamengo. Y aunque el sello es la tenencia, esta vez cedió la posesión. Buscó ser directo y romper por afuera. Y pudo terminar el primer tiempo en ventaja por las bandas, precisamente, cuando Domínguez cambió de frente, Eugenio Mena llegó por la izquierda y metió un centro que Lisandro impactó con la cabeza. Diego Alves tapó notablemente.
También pudo terminar abajo en el marcador cuando Bruno Henrique desparramó a Fabricio Domínguez y reventó el travesaño.
Esa jerarquía individual de Flamengo, con Bruno Henrique, Gerson, Everton Ribeiro y Georgian De Arrascaeta marcó la diferencia ante un Racing comprometido y solidario que equiparó fuerzas con actitud.
Y esa energía tuvo correlato en el complemento. La Academia salió con mucha convicción a volcar el juego en el campo de Flamengo. Especialmente, por la izquierda con el punzante Mena. El chileno llegó dos veces por afuera y se encontró un despropósito de Alexis Herrera. El venezolano le cobró una infracción sobre Everton Ribeiro que sólo existió en su imaginación.
Después, un nuevo desborde de Mena no fue gol porque Lisandro llegó exigido y la pelota se perdió por encima del travesaño.
Fue inteligente Beccacece al notar que René -reemplazante de Mauricio Isla, que se lesionó en el calentamientoes zurdo y tuvo que oficiar de parche como lateral por la derecha. Lució incómodo en la improvisación.
Pero se pinchó Racing, frustrado porque la pelota no entró. Y empezó a tomar el control del partido Flamengo. No fue gol de los brasileños porque Vitinho estaba en offside. Y tal vez por el instinto de conservación, se empezó a meter peligrosamente atrás. Fueron diez minutos de tensión en el área de Gabriel Arias. Hasta que salió del asedio. Y hubo otro gol anulado, esta vez a Reniero. Hubo offside a la salida de un tiro libre. Más tarde, Matheus Thuler le metió un planchazo a Lisandro. Herrera lo había amonestado, pero corrigió vía VAR y expulsó al central brasileño.
Flamengo movió el banco, hizo correr el reloj. Racing buscó, pero sin claridad. ¿Por qué no entró un rapidito como Benjamín Garré? En el final, hubo un tumulto. Postales de una noche que dejó abierta la serie, pero desafía a la Academia a la épica.