Sport Huancayo (Perú) 0 - Argentinos 0 - Copa Sudamericana 2020

SPORT HUANCAYO SE BENEFICIÓ POR EL 1 A 1 CONSEGUIDO EN LA PATERNAL

Argentinos no pudo quebrar el cero y se quedó afuera de la Sudamericana

Argentinos fue hasta Perú tras los pasos de una clasificación a la segunda fase de la Copa Sudamericana. Enfrente, un equipo sin palmarés en las grandes competiciones se le plantó de frente, intenso. Sport Huancayo le copió el plan: juego físico y cerrojo defensivo. En la altura del barrio de Ocopilla, en el desquite de la serie que estaba 1 a 1, el equipo de La Paternal no hizo pie. No pudo quebrar el 0 a 0 y fue eliminado.

El Estadio Huancayo, ubicado a 3.250 metros sobre el nivel del mar, bajo la noche peruana, fue el escenario de un empate en el que el club argentino, cuna de Maradona, poco o nada se pareció a su prócer mítico. Le faltó juego, le faltó gol, empató sin goles y se terminó quedando afuera. El cero a cero lo sacó de la competición al conjunto de Diego Dabove.

Intentó el visitante con los recursos que contó, que esta vez fueron escasos. Trató de tener la pelota, de incomodar cerca del área ajena, pero no le alcanzó. Puso tres delanteros, ofreció movilidad, intentó. Pero ese gol tan deseado no lo pudo convertir ni López ni Hauche ni Silva.

¿Lo mereció? Es cierto: fue un poco más que el conjunto peruano. Pero no resultó ese equipo que hasta se animó a liderar la Superliga. No, le faltó profundidad. Y no tuvo esa contundencia que tanto se le elogia. Nada de eso.

En el segundo tiempo, quizá le faltó esa audacia del que va por todo más allá de la circunstancia. Los cambios que ofreció el entrenador no encontraron el camino para ese gol de la clasificación.

¿Cuánto pudo haber jugado la altura en ese segundo tramo? Nadie puede decirlo mejor que un jugador con experiencia que lo vivió desde adentro y a esos más de 3.000 metros. Lo contó Miguel Torren, el capitán de Argentinos: “Al final se hace mucho más difícil. Ellos están acostumbrados a jugar acá, pero nosotros no”.

Se quedó sin Sudamericana Argentinos, más allá de esa búsqueda final, de esos centros sin ningún destino.

“No estuvimos lejos de pasar. Nos faltó un poco de precisión. Ahora es tiempo de buscar la revancha en la Superliga”, explicó Gabriel Hauche, emblema del plantel que ahora conduce Dabove.

No pudo ser. A Argentinos le faltó lo que tuvo tantas veces: capitalizar lo que generaba, ese golpe claro de nocaut. El cero compartido lo condenó a la eliminación de la Sudamericana. No se trata de un trauma para la campaña. Apenas una despedida que lastima. Queda la impresión: este equipo tiene revancha.