San Lorenzo 0 - Estudiantes (San Luis) 2 - Copa Argentina 2018/2019

ELIMINADO POR UN EQUIPO DEL FEDERAL A

Golpazo para San Lorenzo que sumó otro eslabón a la cadena de desencantos

Estudiantes de San Luis aprovechó las chances que tuvo y avanzó a 16avos de final. Su rival será Barracas Central.

San Lorenzo volvió a recibir un golpe de los que duelen. Se quedó afuera frente a Estudiantes de San Luis por los 32avos de final de la Copa Argentina. La eliminación se suma a la reciente salida prematura de la Copa Superliga frente a Argentinos, a la salida del entrenador Jorge Almirón y a esta sensación de permanente inestabilidad.

Estudiantes -el puntano más exitoso- tendrá que enfrentarse con el flamante campeón de la B Metro, Barracas Central, que viene de dejar en el camino a Unión.

La Copa Argentina tiene particularidades de asombro. No es novedad. Es agrado. Un equipo del fondo de los submundos del fútbol es capaz de dejar afuera a un equipo campeón de Primera. Sirve un ejemplo paradigmático para entenderlo: Real Pilar dejó afuera a Vélez hace un puñado de días.

Pasa también ahora. De repente, un equipo que parece menor se hace fuerte ante un gigante de la historia como San Lorenzo. Estudiantes de San Luis, participante del Federal A, equipo que acaba de perder la chance de subir a la B Nacional.

El primer tiempo, parejo, como si se tratara de un encuentro de la primera categoría. O, mejor dicho, de la misma categoría. Mano a mano. Cara a cara. Intensidad compartida. O no: el deseo de ir por más siempre tuvo la cara de algún puntano.

A los 13 minutos, el gol de Distaulo -tras un rebote en el defensor Gonzalo Rodríguez- marcó la diferencia entre el presunto David y el presunto Goliat. No fue magia. Resultaron cuestiones del juego.

Pero hubo más en el recorrido. San Lorenzo no encontró respuestas. Ni desde el juego ni desde lo anímico. Un dolor para un tiempo de dolores. Y en ese contexto llegó el otro gol. Al inicio del segundo tiempo, Juan Martín Amieva estableció el segundo ante un rival que parecía roto, lastimado. Ese grito puntano se pareció a un nocaut.

Ese hito en la noche derivó en el después: un partido en el que el tiempo se hizo demasiado corto para Estudiantes y demasiado corto para San Lorenzo. El candidato dañado contra el débil fortalecido.

Y los detalles del juego mucho se parecieron a un montón de inquietudes alrededor de San Lorenzo. ¿Qué le pasa a este equipo? ¿Tiene rumbo más allá de los nombres? Bajo el cielo de Santa Fe esas preguntas no tuvieron respuestas y generaron muchas otras.

El tramo final del encuentro resultó una sucesión de previsibilidades: Estudiantes defendiendo con todo y con todos; San Lorenzo buscando en nombre de un milagro respecto del cual nunca estuvo cerca.

Pero no hubo caso. Los intentos de San Lorenzo se parecieron a una impotencia. El entusiasmo de los puntanos se pereció a la gloria por un rato.