Nacional (Uruguay) 1 - Banfield 0 - Copa Libertadores 2018
PERDIÓ SOBRE LA HORA CON NACIONAL DE MONTEVIDEO, QUE CLASIFICÓ AL GRUPO 6 DE LA LIBERTADORES
Banfield fue puro esfuerzo, no le cobraron un penal y se quedó afuera
Hizo un digno papel el conjunto de Falcioni. Cuando iban 0 a 0, el árbitro Ricci ignoró un claro penal a Bertolo.
Fue con ilusión a Uruguay. Con el empuje de Julio César Falcioni -que llegó a Montevideo horas antes del partido tras una nueva sesión de rayos-, Banfield luchó con Nacional pero se quedó con las manos vacías. Sintió impotencia, además, porque el árbitro Sandro Ricci no le dio un claro penal que pudo haber torcido la historia. Después de aquellas definiciones agónicas en el 2-2 de la ida en el Florencio Sola y también en Ecuador, en la fase previa, el sueño de meterse al grupo 6 de la Copa Libertadores se terminó en el Parque Central.Banfield, es cierto, regaló un tiempo. Pero en el segundo dominó y mereció el gol que le daba la clasificación. A los 29 minutos, Romero bajó a Bertolo en el área. “Pensé que lo había cobrado”, afirmó el cordobés. Pero no. El árbitro brasileño le dijo que él le había hecho falta a su rival e hizo seguir el juego. Banfield no pudo despegarse más de esa injusta decisión de Ricci, que incluso luego casi se retira lesionado: estuvo parado el juego 3 minutos y apenas adicionó 5. “No nos cobra un penal y después se hace el lesionado. Eso es tener miedo”, contó Mouche, ya con el pitazo final y con la policía uruguaya adentro del campo para custodiar al juez y la expulsión de Civelli por protestar ya consumada.
En lo futbolístico, Nacional tuvo las mejores chances pero no las supo aprovechar en el primer tiempo. En ese sentido fue clave Iván Arboleda. Primero ante Corujo. Poco después atrapó un intento de pirueta de Romero y, también antes de la media hora, atajó un tiro de Viudez.
Con 45 minutos por delante, Banfield entendió que debía cambiar porque el tiempo se agotaba y que el 0-0 clasificaba el club uruguayo, por sus dos goles como visitante del empate de la ida. Conde, a los 11 minutos, tuvo una doble tapada a Dátolo y a Cvitanich y, poco después, Ortiz improvisó una chilena tras un centro de Dátolo. Luego, llegó el penal no cobrado y, a los 42, la expulsión de Spörle por doble amarilla.
En el último minuto adicionado, con Banfield mal parado atrás, Zunino definió sin fallas para el gol que terminó por rematar al equipo de Falcioni. La bronca de los jugadores argentinos desembocó en la expulsión de Civelli, las quejas de Mouche y la piña de Cvitanich al escudo de un policía. Una imagen que el Taladro no merecía.