Atlético Tucumán 4 - Sarmiento 0 - Copa Argentina 2016/2017

DERROTÓ 4-0 A SARMIENTO Y AVANZÓ A CUARTOS DE FINAL

Atlético Tucumán fue una orquesta y se floreó con una goleada en Salta

El equipo de Zielinski plasmó su diferencia de jerarquía en la red y ahora espera a Vélez o a Huracán.

Atlético Tucumán no tuvo piedad y goleó 4-0 a Sarmiento de Junín en Salta, por los octavos de final de la Copa Argentina. El equipo que comanda el Ruso Zielisnki fue implacable: convirtió todo lo que generó. Y no dio derecho a réplicas. En la próxima ronda, los tucumanos chocarán con el vencedor de Huracán-Vélez (juegan mañana) y mantienen viva la esperanza de ganar la Copa y de volver a jugar la Libertadores el año que viene.

Le alcanzó con un par de minutos a Atlético Tucumán para demostrar que es un equipo de Primera División, un elenco con mayor jerarquía que su rival, que milita en la Primera B Nacional. No había pasado nada en el juego y las diferencias eran inexistentes. Hasta que aceleró el conjunto de Tucumán y la victoria decantó.

A los 34 minutos, a Hernán Hechalar la pelota le quedó picando cerca del punto de penal después de varios rebotes y no perdonó: zurdazo letal y primer gol. Dos minutos más tarde, David Barbona asistió a Ismael Blanco y el delantero anotó el segundo con un cabezazo estético y certero. La cara del entrenador Fernando Quiroz lo decía todo: en 120 segundos se evaporó su planificación.

El buen partido que jugó Sarmiento en la primera media hora no sirvió de mucho. Acaso le quede a Teté la sensación de que dará pelea en la B Nacional, más allá de que arrancó el torneo con un empate y una derrota. Se repite: no había sido malo el partido de los juninenses hasta el tanto de Hechalar. Incluso reaccionó después de los goles, pero se encontró con las manos de Lucchetti.

Tan sólo 4 minutos duró la esperanza de Sarmiento en la segunda parte para descontar y ponerse rápido en juego. En una contra veloz, Atlético volvió a golpear. Barbona quedó mano a mano con Vicentini y el arquero le ahogó el grito al volante, pero tuvo mala fortuna: el rebote le quedó a Blanco. Y el atacante no fue egoísta: habilitó a Barbona, que empujó al gol. El resto, lo que se presumía: Atlético reguló la marcha y Sarmiento no halló energías para ir a buscar el descuento. El juego se estancó. Sobre el final, a los 42 minutos, el ingresado Alejandro Melo remató cruzado para poner el 4-0 final.

“Por suerte me tocó convertir. Estoy contento por eso y porque avanzamos de ronda y seguimos con la ilusión intacta. Hicimos un gran partido desde lo táctico. Sabíamos que Sarmiento iba a plantear un juego de pierna fuerte y lo resolvimos”, resumió Ismael Blanco, una de las figuras de la noche salteña.