Chacarita Juniors es de Primera División
EL CAMPEÓN FUE MUY SUPERIOR, SOBRE TODO EN EL PRIMER TIEMPO, PERO NO CONCRETÓ
Chacarita sufrió con Argentinos pero sostuvo el empate salvador
La mejor versión del equipo de Coyette fue en la segunda parte, cuando dominó los nervios y se soltó más.
Más de 20.000 hinchas de Chacarita Juniors vivieron su gran fiesta. Llenaron el estadio, llevaron todo su cotillón, pintaron la fría tarde de color tricolor, apostaron a sus cábalas. Iban, 90 minutos mediantes, dispuestos a celebrar el regreso a Primera después de siete años.Con este masivo apoyo dejaron en claro que confiaban en el equipo apuntalado por los goles de Rodrigo Salinas, la conducción de Nicolás Oroz y la experiencia de Germán Ré. Un equipo que mostró un juego atildado, efectivo y atractivo durante gran parte del kilométrico campeonato de la B Nacional.
Sin embargo no todo fue color de rosa, porque hubo momentos de nerviosismo y tensión. De preocupación, también, en esa primera media hora Argentinos, el campeón, presionaba alto y elaboraba situaciones de peligro en el área. Y erraba situaciones increíbles. Impactó el gol visitante: mala cesión de Mellado y Javier Cabrera, sólo por la izquierda, definió con un derechazo. En esos instantes Chacarita era puro nerviosismo, mientras un Argentinos sin la mayoría de sus titulares manejaba con tranquilidad el partido. Facundo Barboza, como 5 libre, conducía.
Pareció un déjà vu del partido anterior de Chacarita -el empate con Chicago en Mataderos- porque la cabeza funcionaba a mil revoluciones, las piernas parecían no responder y la claridad se nublaba. Pero reiterando lo ocurrido en esa fecha pasada se recuperó en el segundo tiempo. Archivó el exceso de responsabilidad y se acordó de desarrollar su estilo.
Antes, en ese primer tiempo de ataduras, había alcanzado el empate. Infracción de Lucas Chaves a Oroz y Salinas con su tremenda efectividad se encargó de convertir el penal. 1 a 1 y alivio, porque desde Puerto Madryn las noticias eran buenas.
Oroz y Matías Rodríguez manejaron la pelota, desequilibraron, Salinas pesaba en el área. Y Chacarita pasó un segundo tiempo siendo el Chacarita de siempre. Más allá que el desahogo recién llegó con el último silbatazo de Pompei y la confirmación del empate de Brown. Ahí sí se hizo gigante Chacarita. Vuelta, locura y festejo largo.
Felicitaciones Funebrero!!!