Colón 0 - Almagro 1 - Copa Argentina 2015/2016

ELIMINÓ AL CONVULSIONADO COLÓN Y LE DIO OTRO DOLOR DE CABEZA

Almagro, por el oportunismo de Altamirano

Almagro eliminó a Colón de Santa Fe por los 32avos de final de la Copa Argentina y jugará en 16avos con el ganador de la llave Argentinos Juniors-Deportivo Laferrere. El equipo porteño le ganó inobjetablemente a un flojo equipo santafesino y se hizo acreedor al cheque de 459.000 pesos por superar la fase inicial.

¿Fue sorpresa? No. La diferencia de categoría en este tipo de torneos se nota cada vez menos. Además, Colón atraviesa una crisis institucional, económica y deportiva en los últimos años. Perdió los dos clásicos con Unión y deambula en el 8vo. puesto de la Zona 1 del torneo de Transición.

Por eso lo de Almagro dejó de ser sorpresa. El Tricolor está acostumbrado a dar la nota. A fines del año pasado con el mismo cuerpo técnico (Fernando Ruiz y su ayudante de campo, el ex Vélez Cristian Bardaro) ganó el Reducido de la B Metropolitana y ascendió a la Primera B Nacional. Actualmente ocupa la 9a. posición, 14 puntos por debajo del puntero y único invicto Talleres de Córdoba.

Con mucho orden, fervor y momentos de buen juego, Almagro hizo que no se notara la diferencia de categoría con Colón. Además, contó con su goleador, el “gordo” Oscar Altamirano (¿Que diría de él Carlos Bianchi, quien se sorprendió de los kilos de Ramón “Wanchope” Ábila cuando perdió Boca con Huracán por el mismo certamen?), que estuvo incontenible para la defensa santafesina a la que superó constantemente con sus pivoteos o aguantando la pelota.

Y el premio para Almagro apareció tras un zurdazo desde afuera del área del defensor Abel Luciatti, que el arquero Jorge Broun tapó dejando un rebote corto. Altamirano con un derechazo puso justicia a un partido que hasta ese momento, 6 minutos del complemento, aparecía cerrado.

Colón no reaccionó, le faltó rebeldía y continuó siendo dominado por Almagro. Tanto Mauricio Sperduti como Víctor Figueroa estuvieron bien controlados y eso se tradujo en la falta de juego del conjunto “sabalero”. Su entrenador Ricardo Johansen tardó en hacer ingresar a Pablo Ledesma, quien de todas maneras no pudo generar mucho juego en los minutos que jugó. Todo lo contrario fue el Tricolor que contó con la posibilidad de liquidar la historia cuando Martín Bordonaro (a los 28 minutos) estrelló un disparo de zurda contra el palo: la pelota recorrió toda la línea y fue despejada por un defensor santafesino.

Altamirano salió ovacionado al grito de “¡Gordo, gordo!”. La gente de Almagro festejó largamente el pase de ronda. La numerosa hinchada de Colón (llenó la visitante), se fue de Sarandí vacía reclamándole a sus jugadores mayor entrega. Es que hace tiempo que no conocen de alegrías.