Racing 2 - San Lorenzo 1 - Copa Argentina 2014/2015

CLASIFICÓ A LAS SEMIFINALES DE LA COPA ARGENTINA

Racing dio vuelta a San Lorenzo en el último suspiro

Perdía, pero en el cuarto de hora final lo empató Aued y en el minuto de cierre lo definió Bou, de penal.

Ese resto anímico que sus hinchas le reprocharon no haber exhibido el sábado pasado en el clásico de barrio, Racing lo expuso todo junto, y más también, anoche en La Plata, donde revirtió el resultado y eliminó a San Lorenzo de la Copa Argentina. Bou, al convertir sobre la hora el clarísimo penal que Cetto le cometió a Pavone, se encargó de suturar las heridas que días atrás provocó un revés que le dolió en el alma a la mitad celeste y blanca de Avellaneda.

Entre dos equipos como Racing y San Lorenzo, que se sienten más cómodos cuando el rival hace de la pelota un canto a la posesión, la primera incógnita a develar era cuál de los dos iba a tomar la conducción de la acciones.

Así, el primer segmento del duelo le correspondió al equipo de Diego Cocca, que con Romero como eje y la sociedad que incluyó a Aued y Cerro se tiró sin demoras encima del arco de Saja. Dispuso de dos oportunidades claras como para abril el marcador, pero entre el arquero y Cetto diluyeron dos llegadas que pudieron terminar en gritos de Bou y Noir, respectivamente.

Con el correr de los minutos apareció Ortigoza para izar la bandera de la recuperación. Además creció el trabajo de Elizari -participó poco pero todo lo suyo fue muy bueno-, Kalinski, Mussis y Rolle, un cuarteto que ha participado poco en el equipo titular pero que anoche demostraron que están para sumar.

Así como Torrico había sido fundamental para sostener el 0-0 en el mejor momento del rival, la segundo mitad de la etapa inicial lo mostró altamente eficiente a Saja, quien achicó de modo notable un mano a mano con Cauteruccio.

Sin embargo, el delantero uruguayo se encargó de hacer gritar a su gente al aprovechar dos circunstancias complementarias: el magnífico pelotazo/asistencia de Ortigoza y el horror defensivo de la Academia, que con casi todos sus efectivos en defensa se olvidó de controlar a un atacante que ha demostrado enorme contundencia en esta Copa Argentina.

La etapa complementaria arrancó con una clarísima situación de gol favorable a Racing, pero nuevamente Torrico se agrandó con un notable achique frente a Bou. A continuación, los entrenadores recurrieron a cambios en la búsqueda de escenarios diferentes. Cocca apostó por Pavone para vigorizar la ofensiva; Bauza entendió que con Blanco en cancha podría mejorar el juego de su equipo y, simultáneamente, quitarle al oponente el elemento esencial de juego.

Para los 20/25 minutos finales se comprobó lo que Bauza argumentó en la semana: “Nos estamos quedando sin nafta. Andamos con el tanque de reserva”. Más o menos acertado, la Academia se llevó puesto a su rival, sobre todo después del empate convertido por Aued. En cuanto se paró Ortigoza, el Ciclón perdió al último guerrero que se encargaba de resistir en la zona del círculo central.

Racing aceleró y buscó con decisión, sobre todo en Noir, Camacho, Aued, Pavone y Bou un triunfo que llegó cuando Abal marcaba el tiempo suplementario y todos pensaban en la definición con tiros desde el punto del penal. Sin embargo, el ganador tenía la última bala y entre Pavone -luchó en la jugada del penal- y Bou se instaló en las semifinales de la Copa Argentina.