Racing 3 - Deportivo Táchira (Venezuela) 2 - Copa Libertadores 2015
AL FINAL, RACING PRIMERO
Racing dio vuelta la historia y logró quedar primero
Perdía 2 a 0 con el modesto Táchira. Hasta que se despertó y se llevó por delante a su rival. Milito y Bou establecieron el circunstancial empate. Y en el final, Brian Fernández selló el 3 a 2. Así, ganó el Grupo 8.Estaba preparado para una fiesta el Cilindro porque Racing salía a jugar ya clasificado a los octavos. Pero Racing siempre será Racing, señores. Está signado por el sufrimiento este club. Y tuvo que esperar hasta el último minuto para poder cantar victoria por haber ganado el juego y el Grupo 8 de la Libertadores.
Racing siempre será Racing, señores. Está signado por el eterno sufrir este club, que perdía 2-0 y corría serio riesgo de quedar segundo en el grupo, pero sus delanteros se despertaron justo a tiempo. Y lo dio vuelta con un gol de Brian Fernández ya en el tiempo adicionado.
Aguantaron 70 minutos los venezolanos, pero la potencia goleadora de Bou, Milito y Brian Fernández (que estaba en el banco) salvaron a Racing de una noche que pintaba oscura, sin brillo, porque hasta la luna estaba escondida entre las nubes. Con el triunfo, se clasificó líder del Grupo 8 (Guaraní empató en Perú) y jugará los octavos con una ventaja mayúscula: la de definir la mayoría de los cruces en casa.
Racing siempre será Racing, señores. Por eso anoche aceleró el palpitar de esos corazones celestes y blancos, que se habían olvidado ya de lo que era padecer angustia. Lo sorprendió el Táchira; porque más allá de los cinco defensores que presentó, no diagramó un planteo defensivo, como esperaban en Avellaneda. Pasado el sacudón de los primeros cinco minutos, la visita hizo pie y jugó mejor que La Academia. Pero Racing tiene algunos problemas que no puede solucionar: el volante derecho, por ejemplo. En este semestre, por allí jugaron Díaz, Acuña, Pillud, Aued, Camacho y Castillón. Y ninguno se consolidó. Paradójicamente, por ese sector lo atacaron a Racing.
Fue raro el esquema porque jugó con Camacho bien abierto por izquierda, Cerro y Videla juntos, superponiéndose en un doble cinco incomprensible. Y Romero parado como enganche, otra vez. Por derecha, quedó Pillud, sí, Pillud para atacar, pero con una hectárea por cubrir, Se dieron cuenta de ello los venezolanos, que dos por tres explotaron las espaldas del lateral.
Táchira, por su parte, jugó con Orozco, Maestrico González y Meza arriba. Y tardó diez minutos en calentar motores. Estuvo fino el tridente. Y en la primera de cambio explotó las fallas de la defensa local. Falló Videla, que no logró despejar una pelota. Y Meza encaró con cuerpo y alma ante la marca de Alvarado, que quedó clavado en el suelo. El zurdazo del delantero se clavó sobre el poste derecho de un impotente Sebastián Saja.
No tenía puntería Racing porque lo buscó con Bou, quien sacó un remate que pegó en el poste derecho; lo buscó con Camacho, que metió un zurdazo que se fue alto. La diosa fortuna, parecía, estaba con Táchira, que en el primer ataque amplió la ventaja. Es cierto, otra vez hubo un error del fondo porque Alvarado despejó mal y el Maestrico González metió una pincelada para asistir a Meza, que tiró otro baldazo: 2-0.
Se quedó sin combustible el Táchira, que defendió como pudo. Puso el descuento Milito, gracias a Bou, que peleó una pelota por izquierda. Y la Pantera lo empató con una pelota que capturó en el segundo poste, tras un rebote en Rivero. Siguió buscando el local y tuvo su premio porque Fernández pateó, Contreras puso las manos flojas abajo y a Racing en lo alto.