Indep'te del Valle (Ecuador) 1 - Estudiantes 0 - Copa Libertadores 2015
UN TIRO DE PINEIDA ROMPIÓ EL BLINDAJE DEFENSIVO DEL EQUIPO DE PELLEGRINO
Estudiantes perdió en la altura muy cerca del final
Ahora quedó obligado a ganar al menos por dos goles de diferencia, el jueves en La Plata, para dar vuelta la serie.Una disparo inatajable de Pineida, cuando Estudiantes empezaba a coquetear con la igualdad, resolvió un partido en el que el equipo argentino no creó ni una sola situación de gol. A 2.500 metros sobre el nivel del mar, en la localidad de Sangolquí, cercana a Quito, el equipo platense apostó todo a su defensa y el próximo jueves, en el estadio único de La Plata, necesitará vencer por al menos dos goles si quiere cruzar el repechaje y llegar al Grupo 7 junto con 7 junto con Libertad (Paraguay), Atlético Nacional (Colombia) y Barcelona (Ecuador).
La idea del Mauricio Pellegrino quedó claramente expuesta desde el primer minuto de juego: blindar los caminos que conducían a Navarro con un 4-4-2 bien apretado, a puntos que los puntas Vera y Carrillo, celosamente custodiados por Mina y León, en varias oportunidades tuvieron que retroceder hasta el círculo central.
Sin salida rápida por los costados con Auzqui y el uruguayo Palito Pereyra, el cuádruple ganador de la Libertadores (1968, 69, 70 y 2009) estuvo durante todo el primer tiempo lejos del arco de Azcona.
A los ecuatorianos tampoco les sobraron virtudes en ataque, pero exigieron a Navarro con un puntazo de Cortez y Schunke despejó un peligroso centro que buscaba a Quintero, el único atacante fijo de Independiente del Valle.
El comienzo de la segunda etapa mostró a Estudiantes un poco más adelantado en el campo, como intentando pelear el partido más lejos de su valla. En eso tuvieron muchos que ver Damonte y Gil, los mediocampistas internos, que se plantaron cerca de Orejuela y Arroyo para discutir la media cancha.
Recién ingresado, Caballero encontró un rebote dentro del área y con un derechazo débil hizo trabajar a Navarro.
La entrada del Bonsai Acosta (ex Boca) por el lesionado Pereira abrigó la idea de que crecería el juego a expensas del vértigo que caracteriza al moreno mundialista con la camiseta de Uruguay.
La resistencia terminó a 11 minutos final. Pineida enganchó hacia adentro ante la marca de Cerutti y con derechazo estremecedor la clavó en el ángulo de la mano izquierda de Navarro.