Newell's 1 - Atlético Nacional (Colombia) 3 - Copa Libertadores 2014

EL EMPATE LE BASTABA AL CONJUNTO ROSARIONO PARA LLEGAR A LOS OCTAVOS DE FINAL, PERO QUEDÓ ELIMINADO POR ATLÉTICO NACIONAL

Perdió y ya se despidió del sueño americano

Al cachetazo en el clásico ante Central le sumó un golpe de KO. Y anoche renunció Berti.

Newell’s terminó una semana negra de la peor manera. A cinco días de haber recibido una cachetada tras perder el clásico ante Central, anoche, en su cancha, con su gente y pese a que sólo necesitaba empatar para avanzar de fase en la Copa Libertadores perdió por 3 a 1 ante Atlético Nacional y quedó eliminado.

El partido empezó con el pie izquierdo para Newell’s. Visiblemente dañado en lo anímico, el local tuvo mil inconvenientes en la primera etapa. A los 4 minutos sufrió la expulsión de Víctor López porque el marcador central se peleó con Edwin Cardona (también vio la roja) luego de disputar una pelota que Newell’s pensaba devolver por una cuestión de fair play.

La expulsión trastocó los planes de Berti, que tuvo que correr a Villalba como central y así Banega quedó como un 5 tradicional, bien lejos de su función de creador. Para colmo, al minuto del enroque de piezas llegó un error fatal: tras un pase atrás, el arquero Guzmán arriesgó (como hace desde siempre) para salir jugando pero esta vez lo pagó porque su rechazo rebotó en Trellez y fue gol. Insólito.

Todo siguió en esa tónica. Al ratito, luego de una mala ejecución de Newell’s en un tiro de esquina, Trellez tomó la pelota, avanzó sólo y abrió la cancha para Valencia que habilitó a Cárdenas en el centro del área y el volante, de zurda y cruzado, puso el 2-0.

En Rosario se vivía una mezcla de sorpresa y desencanto. Newell’s no reaccionaba y el equipo colombiano, de a poco, empezó a sentirse cómodo en territorio ajeno. Sin conexión entre las líneas, en el local recién se encendió una chispa de ilusión cuando Figueroa se jugó una patriada , atravesó la cancha de derecha a izquierda y puso un gran pase para Casco a las espaldas de la defensa de Atlético Nacional. El lateral izquierdo, el mejor hombre de ataque de los de Berti, descontó con un fuerte derechazo. Ahí pareció acomodarse el perdedor, que volvió a hacerse dueño de la pelota pero que chocó otra vez contra su falta de profundidad para lastimar en serio. Así Trezeguet, esta vez de titular, jamás tuvo una chance clara frente al arquero Armani.

Y las malas siguieron en ese primer tiempo endiablado: Maximiliano Rodríguez, que regresaba a jugar luego de un desgarro que lo había tenido 20 días afuera, se resintió en el isquiotibial derecho y tuvo que salir. Entonces Berti volvió a cambiar las piezas: salió Villalba, Ortiz dejó el lateral y pasó de central y Orzan, que había entrado en la mitad de la cancha, se sumó a la última línea por la derecha. Demasiados cambios para un equipo que ya estaba muy desorientado.

En la segunda parte Newell’s volvió a tropezar desde el inicio. Nada había pasado cuando Berrio, recién ingresado por Trellez, le ganó en velocidad a toda la defensa y aprovechó una salida apresurada de Guzmán desde al arco para tocar la pelota por arriba y sellar el 3 a 1. Desgastado, ya con el tanque de reserva, el conjunto rosarino lo fue a buscar y tuvo ocasiones aisladas (un remate de Ponce, un zurdazo cruzado de Figueroa y un cabezazo de Trezeguet), bien lejanas al fútbol que supo construir hasta hace poco.

Newell’s perdió de pie, pero volvió a defraudar.