Vélez 0 - Emelec (Ecuador) 0 - Copa Libertadores 2013

UN DISCRETO EMPATE SIN GOLES EN EL JOSÉ AMALFITANI

Vélez ganó el grupo, aunque no logró desnivelar a Emelec

Uno estaba clasificado y al otro le alcanzaba con un empate, lo que al cabo consiguió. Por eso, ninguno arriesgó.

Los dos quedaron conformes con el empate pero festejó Emelec, que logró la clasificación a octavos de final dejando en el camino nada menos que a Peñarol. Vélez quería ganar, es cierto, para terminar con 15 puntos y asegurarse el primero o el segundo lugar en la grilla de los primeros de grupo. Terminó con 13 y estará igualmente en los puestos de vanguardia.

No se hace drama: por experiencia, sabe que en el mano a mano la historia es otra. La única preocupación, tras el 0-0, sigue siendo la falta de gol. No especularon. Pero regularon energías desde el minuto inicial. Vélez, porque ya estaba clasificado -fue el primer equipo argentino en lograrlo- y Emelec, porque tras vencer a Peñarol, el empate le cerraba perfecto. No fueron ofensivos.

Pero los dos tuvieron situaciones en la primera etapa como para abrir el marcador. Pocas, esporádicas, pero chances al fin. No fue bueno en general el encuentro; sin embargo, se valoriza el buen trato de pelota de los dos. El de Vélez ya es una costumbre: logre o no sus objetivos, tiene un estilo de juego definido. El equipo de Gustavo Quinteros ratificó lo que había mostrado en la fase de grupos: prolijo en el traslado y peligroso arriba. Ricardo Gareca no especula nunca.

Siempre intenta poner el mejor equipo posible. En el torneo local y en la Copa, que este año es prioridad. Tuvo algunos cuidado, eso sí, de no perder jugadores por acumulación de amarillas para el primer partido de los octavos de final. Por eso, tuvieron descanso Fabián Cubero y Francisco Cerro. En cambio, también estaban al límite Peruzzi, -fue titular- y Bella -fue al banco-, y cuando hacía ejercicios precompetitivos fue insólitamente amonestado. No estará en la ida de octavos. Gareca volaba de bronca.

Las mejores chances para Vélez estuvieron en los pies de Insúa, siempre pensante, siempre movedizo. Pero le faltó la estocada final. Primero se trastabilló y no pudo hacer pie ante un gran pase de Pratto. Después, metió un tiro libre desde la derecha que nadie pudo conectar y la pelota pasó muy cerca del palo derecho de Deer. Luego, no pudo rematar con fuerza un buen pase de Romero (cada día juega mejor, por izquierda, por derecha o por el centro). Todas en en el primer tiempo. En el segundo tiempo también tuvo una y no pudo definir. Emelec, con cautela, buscó siempre marcar ese gol que le daba tranquilidad, pero en los últimos 25 minutos del partido bajó la cortina.

Se retrasó y empezó a hacer tiempo. Entonces, Vélez se animó un poco más, fue a buscarlo. Tuvo el triunfo en la última jugada, previa guapeada que obligó a un corner del pibe Freire -que rindió al máximo-, pero el remate con destino de gol de Rescaldani pegó en la cabeza de Nasuti y se fue al tiro de esquina. Ninguno de los dos intentó salirse del libreto original. El empate ya los tenía adentro desde el minuto cero.