Colón 3 - 1 Racing - Copa Sudamericana 2012
EL ARQUERO DE OLIVERA EVITÓ UN RESULTADO MÁS AMPLIO PARA LOS SANTAFESINOS
Colón fue más y dejó a Racing muy preocupado
El equipo de Luis Zubeldía fue superado en muchos pasajes. La revancha será el jueves próximo en Avellaneda.
En su vuelta a la Copa Sudamericana, tras nueve años de ausencia, Colón tuvo una actuación sobresaliente, de esas que marcan un camino. Y sacó una buena ventaja para la revancha en Avellaneda, que no fue mayor por las atajadas de Jorge De Olivera. Todo lo que Colón generó en el primer tiempo, lo concretó en el segundo. Y hasta pareció demasiado injusto el empate inmediato de Gabriel Hauche. Arrancó el complemento con la misma intensidad con la que había culminado los 45 minutos iniciales. Primero, aprovechó un error en la salida de Racing que Emmanuel Gigliotti supo capitalizar para asistir a Lucas Magni, quien luego de dejar en el piso a Iván Pillud, la picó ante de manera exquisita ante la salida de De Olivera y la estéril corrida de Fernando Ortiz.Luego, Mugni inició la jugada por derecha, se la dio a Gigliotti, éste alargó para Curuchet, quien definió con un toque sutil. En el medio, estuvo la igualdad de Racing a través de una elegante definición de Hauche (le picó la pelota Diego Pozo), luego de una jugada sucia en la que Mauro Camoranesi robó el balón y se la dio al delantero, que estaba habilitado por Bruno Urribarri. Todo eso en 13 minutos eléctricos, veloces, con una intensidad que mostraron a lo largo de los 90 minutos, sobre todo el local. Y la frutilla del postre llegó a un minuto del final, con un gran contraataque comandado por Ricardo Gómez y finalizado por Gabriel Graciani.
Los argumentos de Colón se encuentran en el manejo de la pelota, y en las llegadas al arco defendido por De Olivera, quien en los primeros 45 minutos fue bombardeado y tapó todo lo que le tiraron. Le sacó un cabezazo a Gigliotti; un remate débil de zurda a Mugni; otro tiro de afuera de Mugni pero esta vez más fuerte, -que lo obligó a dar rebote- pero se recuperó para ahogarle el grito de gol a Gigliotti en el mano a mano; y otros dos disparos de Prediger desde afuera.
Fue el mejor partido del equipo de Sensini hasta aquí. En cambio, Racing estuvo lejos de mostrar lo que hizo en el clásico ante Independiente. El equipo de Zubeldía esperó en su campo, e intentó salir rápido con Centurión y Villar pero Colón resolvió muy bien esa estrategia previsible ajustando las marcas en los laterales, y con un doble cinco (con Bastía y Prediger) bien ubicado para hacer los relevos correctamente.
Colón encontró la llave para abrir a la defensa de Racing en el sector derecho. Facundo Curuchet estuvo muy rápido y picante. Corvalán era desbordado constantemente. Si no era por el delantero, los que aparecían eran Iván Moreno y Maximiliano Caire, que pasaban como aviones para causar daño. Además, Sensini parece que tomó nota de las falencias defensivas de Racing en la final de la Copa Argentina y de la misma manera que lo hizo Boca, Colón le generó problemas con pelotazos a espaldas de Cahais y Corvalán. Zubeldía intentó cambiar posiciones en la mitad de la cancha pero no le dio resultado. En definitiva, Colón ganó porque superó a Racing en toda la cancha. Pudo haber definido la serie en su casa. Pero con dos goles de ventaja, llega más tranquilo a la revancha.